Considerada por muchos como la primera gran discoteca de Eivissa y para otros tantos, la mejor discoteca del mundo en esa época (1978-1990), KU supuso una revolución, una explosión para la isla hasta el punto de que todavía galerías fotográficas de lo que fueron aquellos días pueblan espacios en la red. Uno de ellos es el del artículo Imágenes de Ku Ibiza (Privilege) en los años 80 de la publicación online beatMash, aunque hay páginas enteras de Facebook como KU Ibiza Best Years con multitud de álbumes que albergan fotografías que se tomaron en KU en aquellos años.
Antoni Riera Campos comenzó a trabajar en 1978 en el Club Sant Rafael, germen de KU, y se dedicó durante muchos años a la decoración y vestuario de las grandes fiestas de la mítica discoteca. Entre las más destacadas, Riera recuerda los eventos dedicados a «Miss y Mister Tanga, Miss y Mister Ku, Miss Camiseta Mojada, La Noche Blanca, La Noche Roja, e incluso una fiesta dedicada a los Sanfermines «con vaquilla y todo en la piscina». Aunque una de las más populares era la Fiesta de Brasil «para la que traían brasileños que tocaban batucadas, los trajes eran espectaculares y se decoraba toda la discoteca con esta temática».
Para Riera, era muy simbólico sobre la gran diversión que ofrecía KU, que las personas que trabajaban en otras discotecas estuvieran deseando acabar su jornada para poder acudir a KU a pasarlo bien. «Incluso los militares que poblaban sa Coma en aquellos tiempos, con el fin de entrar gratis en la discoteca, colaboraban recortando papel celofán para la decoración de las fiestas de KU».
La gran piscina de la discoteca y su estructura era otro de sus grandes atractivos. «Todos los días la piscina estaba abierta y a partir de una hora, sobre las 5 de la madrugada, todo el mundo se bañaba. En medio de la piscina había una pasarela con una fuente que de vez en cuando se encendía y los que estaban bailando allí se mojaban. También recuerdo que de una de las terrazas se iniciaba un gran tobogán que acababa en la piscina como la boca de un dragón por lo que te podías tirar desde la terraza y acabar en la piscina. Era tan divertido como espectacular», valoró Riera.
Especial mención tuvo Toni Riera para el grupo de bailarines de KU, que ya comenzaron a amenizar el puerto y las playas con sus bailes y alegría. Y recuerdo también para el extravagante grupo Locomía. «Era maravilloso verles bailar», aseguró Riera.