Los duques de Sussex, Meghan Markle y el príncipe Enrique, se han convertido este lunes en padres de un niño que ocupa el séptimo lugar en la línea de sucesión al trono británico.
Markle ha dado a luz a un niño de más de tres kilos a las 5.26 (hora local) en la casa de campo de Frogmore, en Windsor, donde vive la pareja, en un parto en el que ha estado presente el padre.
«Ha sido la experiencia más increíble que he vivido», ha dicho el duque de Sussex, en declaraciones a la prensa desde la residencia familiar.
El príncipe Enrique ha aclarado que aún no han decidido qué nombre llevará su primer hijo. «No hemos tenido mucho tiempo para pensarlo. Es el siguiente paso», ha indicado.
Además, ha avanzado que la primera imagen del pequeño se conocerá en dos días, cuando comparecerán los tres juntos ante los medios de comunicación.
«La pareja da las gracias por la emoción compartida y el apoyo recibido durante este momento tan especial de sus vidas», reza el comunicado difundido por los duques de Sussex.
El Palacio de Buckingham ha asegurado que toda la familia, incluidas la reina, Isabel II, y la madre de Markle, Doria Raglandha, «está encantada con la noticia».
«Felicidades al duque y a la duquesa de Sussex por la llegada de su primer hijo. Os deseo todo lo mejor en este feliz momento», ha escrito la primera ministra británica, Theresa May, en Twitter.
«Felicidades a Meghan y Enrique por el nacimiento de su hijo. Espero que (la madre y el niño) estén bien», ha declarado por la misma vía el líder del Partido Laborista, Jeremy Corbyn.
El nuevo miembro de la familia real aún no tiene título porque no lo adquiere automáticamente, sino que debe concederlo la monarca británica.