Esther Arroyo está feliz, y es que después de solicitar al Tribunal la invalidez por el aparatoso accidente de tráfico que le dejó graves secuelas físicas, la justicia le ha dado la razón. La actriz, cuya vida dio un giro de 180 grados el 10 de octubre de 2008, ha obtenido la invalidez.
De este modo se despide de los escenarios y la pequeña pantalla. «Es duro, pero ya está asumido», explica la actriz. Todo lo imposible lo dejo atrás», ha asegurado.
Como recordaremos, el día de los hechos, Esther iba acompañada, en el coche que conducía su marido, por su amiga Ana Torroja. La cantante salió ilesa, pero ella tuvo que ser intervenida de urgencia en el Hospital Universitario de Puerto Real (Cádiz) con pronóstico reservado. El accidente le costó la vida a un amigo suyo, Ulises, y dejó graves secuelas para ella y su marido.
La ex Miss España solicitó la invalidez permanente porque dichas secuelas le impedían trabajar. «Me la dieron ñla invalidezí hace poco. Es la total. (... ) No puedo estar más de cuatro horas de pie al día, se me resiente la rodilla. Si no me cuido la pierna me tendré que poner la prótesis antes y estoy intentando mantenerla en su sitio», explica ahora.
En cuanto a sus planes de futuro, asegura: «Ahora mismo no pienso en nada, estoy trabajando con mi pierna, tengo que hace deporte diariamente, tengo tratamientos médicos cada quince días y es mi planteamiento de vida, la pierna está como está y no tengo más planes porque hasta que no salga el juicio no puedo planificar nada en mi vida, pero estoy muy bien, no pienso en lo que quiero hacer sino en lo que tengo que hacer ahora y es la única manera de ser feliz, pensar en el día a día».