La actriz estadounidense Amber Heard, esposa de Johnny Depp, comparecerá ante la justicia australiana el próximo septiembre tras ser acusada de la entrada ilegal en el país de sus dos perros, informan este jueves medios locales.
La Fiscalía Pública de Australia acusó a Heard de dos cargos vinculados a la importación ilegal de animales contraviniendo la Ley de Cuarentena y producción de documentación falsa, según la cadena local ABC.
Heard afronta una pena máxima de 10 años de cárcel o una multa de unos 73.825 dólares (67.408 euros), agregó la fuente.
Boo y Pistol, como se llaman los perros, entraron el pasado mayo en el país en el avión privado de Deep, quien se encuentra filmando en las costas australianas la próxima entrega de Piratas del Caribe, sin haber obtenido los permisos necesarios para acceder a Australia.
El ministro australiano de Agricultura, Barnaby Joyce, llegó a amenazar con sacrificar a los animales si no eran devueltos a Estados Unidos de inmediato.
Unos días después, los canes fueron enviados al país norteamericano.