Tamara Gorro se ha dirigido a sus seguidores en Instagram para hablarles de nuevo sobre su intervención a causa de un tumor benigno. La influencer tuvo que ser operada de urgencia y todavía padece las secuelas, pero ha mandado un mensaje de calma y optimismo.
La modelo, de 33 años, ha compartido unas stories dirigiéndose a la que denomina su «familia virtual»: «Ya os he enseñado cómo me he vestido hoy y ahora os voy a enseñar la tripa, que está inflamada aunque ha bajado mucho».
En las grabaciones, Gorro levanta la camisa que lleva puesta para enseñar la barriga. «Si yo os muestro cómo me visto es por si puedo aportar ideas por si alguien está pasando por lo mismo que yo, no porque sea un referente de moda, que ya se sabe que no», avanza.
Mostrando la curva de su barriga, añade: «Me ha bajado mucho la tripa, pero mirad cómo la tengo de inflamada. A mí no me da ninguna vergüenza enseñarlo, que esto es naturalidad, esto nos pasa a mucha gente».
Finalmente, la de Segovia valora en los vídeos que no vale la pena comprarse ropa mientras su tripa esté hinchada: «La cosa es ir apañándonos. ¿Yo me puedo comprar tres pantalones? Pues sí pero, ¿para qué? Si esto se tiene que deshinchar, es tontería».
La esposa de Ezequiel Garay tuvo que ser operada tras sufrir fuertes dolores de estómago. «El doctor vio que había una pelotita que no debería estar ahí [en el ovario], pero que podría irse con la menstruación. Pero esa menstruación nunca llegó», explicó hace unos días, cuando se decidió a hablar de su ausencia.
La influencer explicó que se trataba de un tumor benigno y que, a pesar de haber vivido una «montaña rusa» de sentimientos ante «la inquietud y la duda», todo se quedó en un susto, pues la intervención se desarrolló a la perfección.