Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia continúan con su relación, tal y como han confirmado este miércoles diversas revistas. Aunque en las últimas semanas se hablaba de una posible reconciliación entre el vasco y la infanta Cristina, Lecturas asegura que la relación está rota. «No va a haber reconciliación ni perdón», titula la publicación en su portada que, además, indica que la intención del matrimonio es divorciarse. Una información que encaja con las imágenes publicadas en ¡Hola!, en las que se puede ver al exduque de Palma junto a su compañera de trabajo.
En las fotografías aparece la pareja paseando y en un centro de yoga, desmintiendo así todos los rumores de ruptura. Estas instantáneas se han hecho públicas casi un mes después de que se publicase que Iñaki había viajado hasta Suiza para reunirse con su todavía mujer. Este encuentro se produjo horas antes de que emitiesen el comunicado en el que confirmaban la «interrupción de su relación matrimonial». Lecturas indicó que el exjugador de balonmano y su hijo Miguel Urdangarin se trasladaron hasta Ginebra para mantener una reunión familiar con Cristina e Irene, la hija menor del matrimonio que vive con ella.
Las dudas sobre la vuelta del matrimonio aumentaron cuando Mario Pascual Vives, abogado de Urdangarin, aseguró en Rac1 que la separación «no es un cese de la relación ni un divorcio, es un tiempo que ellos se dan. Tampoco se han marcado ningún plazo concreto». La ya expareja pone así fin a 24 años de matrimonio, una relación que ha estado marcada por el nacimiento de sus cuatro hijos y por el caso Nóos. Su historia de amor comenzó en los Juegos Olímpicos de Atlanta en el año 1996, cuando una joven Cristina conoció a Iñaki, que participaba como jugador de la selección de balonmano.