Tamara Falcó e Íñigo Onieva celebraron su boda a principios de julio y, desde entonces, no han querido escatimar en gastos para vivir unas semanas idílicas que forman parte -la mayoría- de su luna de miel. La empezaron en Sudáfrica, pasaron por Zambia, terminaron recorriendo la Polinesia Francesa y ahora han aterrizado en Cádiz.
Allí, acudieron a su primer evento público como recién casados el pasado fin de semana, la boda de la íntima amiga de Tamara, Luisa Bergel, en Cádiz. Con resaca emocional, la pareja ha aprovechado la estancia en la ciudad andaluza para hacer uno de sus planes favoritos.
Así lo ha hecho ver en su perfil de Instagram, con unas imágenes en las que compartía un lujoso plan con Onieva en Cádiz, horas después del enlace. Los tortolitos aparecieron por Aponiente, el restaurante de Ángel León, que cuenta con tres estrellas Michelín y está ubicado en el Puerto de Santa María. Con una amplia degustación de los platos más minimalistas y los vinos más exclusivos, la hija de Isabel Preysler y el madrileño brindaron una vez más por su felicidad en uno de los mejores restaurantes del país.
Una felicidad que podría tener su guinda en la llegada de un bebé, tal y como desea la pareja y tantas veces lo ha hecho público. Sin embargo, aún tendrán que esperar un tiempo, ya que, tal y como informa Diez Minutos, ahora mismo no puede ser posible.
El motivo, según la revista, no es otro que las vacunas que se tuvieron que poner para su luna de miel, algo que a la hija de Isabel Preysler no le permiten quedarse embarazada, al menos, en los próximos tres meses. "Para viajar a Sudáfrica lo recomendable es vacunarse de la Hepatitis A. Si además visitas el Parque Nacional Kruger (como hizo el matrimonio) también debes vacunarte de la malaria. Esto significa que tienes que tomar una pastilla diaria (Malarone) desde el mismo día que llegas hasta una semana después, y esperar al menos tres meses para quedarte embarazada. Hacerlo antes está contraindicado por el altísimo riesgo de complicaciones y malformaciones", informan a este medio desde la Unidad del Viajero del Hospital Carlos III de Madrid.
Es por esta razón, siempre según la revista, por el que Falcó, a pesar de haber confesado estar inmersa en un tratamiento de fertilidad natural llamado Fertilitas, deberá esperar aún hasta noviembre para poder pensar en el bebé.