La rapera estadounidense Megan Thee Stallion fue demandada este martes por un excamarógrafo personal que alega que vivió acoso sexual de parte de la cantante, a quien también acusó de crear un «ambiente laboral hostil».
Según el documento presentado ante un tribunal de Los Ángeles, el demandante Emilio García, sostiene que fue despedido por la cantante en represalia por sus quejas sobre cuestiones salariales y horarias y que el tiempo en el que trabajó con la rapera recibió comentarios despectivos sobre su apariencia física.
En la demanda, García explica que Megan Pete, el nombre legal de la cantante, mantuvo relaciones sexuales con una mujer con él a su lado mientras se encontraban en un automóvil en movimiento en Ibiza en 2022, y que eso lo hizo sentirse «avergonzado, mortificado y ofendido».
También describe que Pete le pidió que nunca mencionara lo que había visto aquella noche y que en el mismo viaje la rapera hizo comentarios lascivos sobre su aspecto físico en repetidas ocasiones que lo hicieron sentir «denigrado», al llamarlo «perra gorda» o pidiéndole que «escupiera la comida».
García también sostiene que tras dicho viaje la remuneración por su trabajo cambió de una tarifa mensual al pago por diversas tareas que había por las que tenía que presentar facturas, pero que la rapera pretendía que prestara los mismos servicios pese al cambio de estructura salarial.
El camarógrafo comenzó a trabajar con la autora de 'Hiss' en 2019 y terminó su relación laboral con ella en junio de 2023.
La demanda reclama los salarios que no le fueron pagados más intereses, el pago de las horas extra que laboró y no le fueron remuneradas, además de sanciones legales y salariales conforme a la ley laboral de California, daños punitivos según las pruebas, además de los honorarios de los abogados.
«Megan solo tiene que pagar a nuestro cliente lo que se le debe, asumir su comportamiento y abandonar este tipo de conducta de acoso sexual y de avergonzar a los gordos», dijo en un comunicado recogido por medios estadounidenses el abogado demandante Ron Zambrano.
Asimismo, en un comunicado para la revista estadounidense People, Alex Spiro, el abogado de la cantante de 29 años, aseguró que se trataba de un litigio laboral por dinero «sin ninguna demanda de acoso sexual presentada y con acusaciones salaces para intentar avergonzarla».