El actor estadounidense Eric Roberts ha dicho la palabra mágica: perdón. Y lo ha hecho hacia su hermana Julia Roberts y la hija de él, Emma Roberts, por afirmar que le debían la fama, según detalla la revista Hola!. Eric fue el primero en triunfar en Hollywood y ahora se arrepiente de las declaraciones que dio en su momento, pero ahora ha querido dar un paso atrás y reconocer su fallo en su libro autobiográfico Runway train, or the story of my life (Tren fuera de control o la historia de mi vida hasta ahoraTren fuera de control o la historia de mi vida hasta ahora).
«Fue una estupidez haber dicho eso», asegura en el libro y antes de esto dice lo siguiente: «Una de las cosas por las que me gustaría disculparme en este libro es por haber dicho públicamente en más de una ocasión: 'Si no fuera por mí, no habría Julia Roberts'. Eso no solo es desafortunado, sino que también es falso».
En esta autobiografía también hay un espacio para su hija Emma Roberts, que tuvo con Kim Cunningham. Eric se vio durante su etapa como actor inmerso en el mundo de las adicciones, concretamente las drogas. «La mayor consecuencia de mi consumo de drogas fue perder a Emma», afirma, ya que la perdió la custodia a los pocos meses de nacer.
«Me imagino que seguiré siendo el hermano de Julia y el padre de Emma Roberts durante el resto de mi vida. Me gustaría hacer honor a esa promesa, hacerme a un lado con orgullo y gracia. Esa es una de las razones por las que escribí el libro», afirma en el libro, según la revista.