Debido a una serie de problemas legales, la saga cinematográfica sobre James Bond sufrió un parón de seis años, siendo retomada en 1998 por Martin Campbell en ‘Goldeneye', primera entrega de la serie cuyo argumento no se extrae de las novelas de Ian Fleming.
En ‘Goldeneye' se incorporó Pierce Brosnan como el nuevo Bond (Timothy Dalton había renunciado al papel) y Judi Dench se convirtió en la primera mujer en dar vida a M, personaje antes encarnado por Robert Brown. El tema central correría a cargo de una pletórica Tina Turner.
Durante unas vacaciones, Bond conoce a la bella y letal Xenia Onatopp, que intenta hacerse con los planos de un nuevo helicóptero invulnerable a las interferencias. Bond luchará para impedir que un sindicato de armas utilice el satélite GoldenEye contra Londres para causar un colapso financiero mundial.