Nicolás Coronado ha sido una de las revelaciones de la quinta edición de MasterChef Celebrity. El joven, que llegó a la final y era uno de los favoritos a hacerse con la victoria, que finalmente cayó en manos de la actriz Raquel Meroño, ha tenido que pagar un alto peaje por si participación en el talent culinario de La 1.
El hijo de José Coronado ha tenido que pagar un alto precio personal por su gran implicación, ya que, según desveló él mismo en la final, su paso por el concurso había terminado con su última relación sentimental. «¿Quién me mandaría a mí meterme en MasterChef, que me ha dejado hasta la novia?», dijo.
Algo que en plena batalla culinaria podía parecer anecdótico, pero que poco después se ha confirmado.
«Ahora estoy soltero y feliz», ha declarado a Diez Minutos.
Sobre su tonteo en uno de los programas con Ana, la ganadora de la última edición de anónimos, asegura: «Seguimos en contacto, porque además yo tengo una marca de suplementos naturales y se los mando para que lo pruebe. Lo nuestro es solo una amistad, porque tiene novio».
No obstante, él dice: «No soy ni de romper relaciones ni de pico y pala. Si la cosa fluye, maravilloso».
Pobre chico, tiene que aprender que la vida es dura