España | 78 |
Israel | 64 |
ESPAÑA (28+16+14+20): Calderón (5), Navarro (6), Jiménez (8), Gasol (25), Garbajosa (13) -cinco inicial-, Grimau (7), Felipe Reyes (9), Herreros (6), De la Fuente (-) y Antonio Bueno (-).
ISRAEL (22+14+15+13): Sharp (16), Saffar (4) Burnstein (5), Shelef (2), Kozikaro (13) -cinco inicial-, Mizrahi (-), Tapiro (12), Green (10), Gordon (2), Halperin (-) y Sheinfeld (-).
Arbitros: Oget (TUR) y Ziemblicki (POL). Excluyeron por faltas personales a Green (m.38) y Tapiro (m.39).
Jorge Muñoa (Efe)|ESTOCOLMO
La selección española de baloncesto volverá a pelear por las medallas continentales por tercer campeonato consecutivo, en Estocolmo, donde el próximo sábado, a partir de las cinco de la tarde, disputará las semifinales del Europeo 2003 merced al esforzado triunfo logrado sobre Israel en los cuartos de final.
España sufrió casi hasta la misma bocina contra un adversario habituado a vivir en las distancias cortas y a explotar los continuos ramalazos anotadores que provocan sus defensas de ajuste, finalmente desbordadas por la intensidad y la concentración del combinado español, que ya suma diez victorias consecutivos frente al cuadro hebreo, ante el que no pierde desde 1994. Los hombres de Moncho López lograron el objetivo más difícil de todos cuantos se habían planteado frente a los hebreos, que era controlar el ritmo del juego y, gracias a ello, abrir una rápida brecha que anunció lo que parecía iba a ser un cómodo encuentro.
El ejecutor de los primeros puntos españoles fue un Pau Gasol absolutamente dominador en la zona, imparable para los postes israelíes, a pesar de las ayudas largas de los hombres pequeños, muy bien aprovechadas por la selección nacional para doblar balones al perímetro y anotar desde el exterior (8-2 m.3). Daba la sensación de que Israel carecía de opciones reales, pero si en algo es especialista el equipo de Muli Katzurin es en moverse con tremenda sangre fría cuando tiene el marcador en contra.
España ejerció el mando de forma incontestable hasta el minuto nueve (23-13), pero los últimos sesenta segundos del periodo bastaron a los hebreos para reducir su desventaja hasta un 28-22 que, posteriormente, se convirtió en el inicio de una excelente racha sobre el aro español. Israel mantuvo su aro a cero hasta la mitad del segundo cuarto, cuando Felipe Reyes les quebró una racha de 5-13 (del 23-13 a 28-27) después de sufrir las habilidades de Meir Tapiro y la calidad de Ido Kozikaro y Yaniv Green, los tres pilares del cuadro judío. Las acciones de esos hombres y el sistema defensivo de Katzurin habían frenado a España.