Carmen Menéndez|SCHINIAS
David Cal se consagró como el deportista español más laureado en
Atenas 2004 al sumar al oro logrado el viernes la medalla de plata
ayer en la final de C-1 sobre 500 metros, por detrás del alemán
Andreas Dittmer, precisamente segundo el viernes tras el gallego en
los 1.000 metros.
España finaliza su actuación en los Juegos Olímpicos de Atenas reencontrándose con dos podios veinte años después de la última medalla. Cal sumó su segunda medalla en la jornada de clausura de la competición de piragüismo, que contó con la presencia de La Reina Doña Sofía, a la que acompañaban la Infanta Cristina y su esposo, Iñaki Urdangarín, así como el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero.
Además, del segundo puesto de Cal, el concurso de los españoles ofreció ayer dos diplomas olímpicos, por los quintos puestos conseguidos por el K-2 de Fran Llera y Damian Vindel, y el de Beatriz Manchón y Teresa Portela.
El joven canoista gallego fue segundo en la final de 500 metros en la que se impuso el alemán Andreas Dittmer, el campeón olímpico en Atlanta y Sydney, que el viernes fue destronado por el gallego.
Ayer, en una carrera en la que el español pareció acusar más el cansancio del viernes, y donde las condiciones de viento, que soplaba lateralmente dificultando a Cal, en un grado mayor que al resto, ya que era el único zurdo de los que tomaban parte en la final.
Pendiente de mantener la buena conducción de su canoa, el español mantuvo al alemán durante toda la regata al límite y lejos de concesión alguna. Dittmer acabó asegurándose la medalla de oro, pero sufrió hasta el último metro en una llegada ajustadísma, con ambos en un mismo segundo. El tiempo de 1 minuto y 46 segundos, con cuatro décimas a favor del germano, recoge la igualdad de una prueba en la que el ruso Maxim Opalev tuvo que conformarse con la tercera plaza (1m.47), después de haber renunciado a participar en el 1.000 para preparar de manera exclusiva el 500.