Carlos de Torres|MADRID
El español Roberto Heras, del equipo Liberty, se proclamó vencedor
de la 59 edición de la Vuelta a España e igualó el récord de tres
victorias que estaba en poder del suizo Tony Rominger desde hace un
decenio, una vez finalizada en Madrid la contrarreloj de 28'2
kilómetros en la que se impuso Santiago Pérez por delante de Paco
Mancebo, los dos corredores que subieron al podio en segundo y
tercer lugar. Heras, de 30 años, apuntó con letras doradas en su
palmarés la tercera Vuelta, que se une a las obtenidas en 2000 con
la camiseta de Kelme y 2003 con la del US Postal. Considerado uno
de los mejores escaladores del mundo, mostró más regularidad que
nadie a lo largo de las 21 etapas y aunque paso momentos de apuros
en su terreno de montaña, salvó el tipo en la contrarreloj decisiva
con un cuarto lugar a 13 segundos del vencedor.
El ciclista de Béjar (Salamanca) se subió también al escalón más alto de la historia para compartir con Rominger la cifra de tres victorias absolutas. En el podio de Cibeles el campeón del Liberty estuvo escoltado por la gran revelación del año, Santi Pérez y por el campeón de España Francisco Mancebo, segundo y tercero respectivamente. Tres escaladores en lo más alto. La emoción de la jornada, en principio con todo por resolver no conoció sorpresa alguna en la lucha por el oro, como tampoco sobresaltos por la lucha de la tercera plaza del cajón, ya que Mancebo no dio opción a Valverde, lejos siempre de la lucha y el murciano hubo de conformarse con la cuarta posición. Santi Pérez volvió a lucirse con un poderío propio de un campeón en potencia. A sus exhibiciones en la etapa de Granada y en la cronoescalada de Sierra Nevada, se unió la de la contrarreloj de Madrid, en terreno llano, donde también se defiende. El asturiano dominó la carrera de principio a fin, pero en ningún momento distanció a Heras.
El discípulo de Pino marcó los mejores tiempos en los pasos intermedios. En el kilómetro 10 marcó 4 segundos mejor que Heras, en el 23 la ventaja era de 7 y en meta de 13, es decir que el líder mantuvo a raya al rival que le ha dado más dolores de cabeza. Pérez invirtió un tiempo de 35.05. Mancebo, en gran actuación le siguió a 7 segundos y Carlos Sastre fue tercero a 8. Así firmó su tercer triunfo parcial. Con estas demostraciones no resulta extraño que los principales equipos del pelotón anden locos por contratarlo. Roberto Heras, por su parte, estuvo a la altura de lo que se jugaba. Mostró experiencia y fuerza para mantenerse en unos registros que le garantizaban el maillot oro final. Manolo Saiz le mantuvo informado y pudo «disfrutar en los últimos 8 kilómetros». La experiencia de años anteriores fue vital para el campeón. En 2002 le tocó perder el último día ante Aitor González y se llevó «un gran disgusto», pero en 2003 compensó al imponerse a su actual compañero Isidro Nozal en Abantos. «No me podía poner nervioso y fallar como hace dos años», explicó Heras, quien sacó «un gran aprendizaje» después de dos años al lado de Armstrong.