Clayton de Lima Silva, nacido en Recife (Brasil) el 29 de junio de 1977, es historia viva del Gasifred Atlético. El brasileño, en su séptima temporada, se convirtió el pasado fin de semana en el primer jugador del club en superar los 200 goles -acumula 201- tras hacerle dos al Playas de Salou.
-200 goles. Se dice pronto.
-El domingo me alegré por llegar a los 200, pero también estaba triste por no haber ganado. La verdad es que no imaginaba llegar a esa cifra. No sé cuántos más voy a meter, pero voy a seguir marcando muchos.
-¿Qué gol no olvidará nunca?
-El 4-3 contra el Barça. Íbamos ganando 3-0, nos empataron y, cuando faltaban cuatro minutos, Luisjo me dio el balón y marqué por la escuadra. Había mucha afición y se luchaba por el play off.
-¿Y cuál ha sido el más espectacular?
-También fue un 4-3 contra Andorra. Me dio el balón Lucas, recibí de espaldas en el área y, cuando me giré, hice como que chutaba para recortar. El jugador y el portero se fueron al suelo y marqué solo.
-Tiene fama de guasón. ¿Ya ha vacilado en el vestuario de sus 200 goles?
-Hay mucho tiempo aún (risas). Me gusta hacer muchas bromas, pero no para hacer daño, sino para reír. Me gusta mucho bromear con Ernesto. Él marcó 32 goles el año pasado y a veces me pregunta «¿tú cuántos marcaste?». Es vacilón también (risas). Cuando le coja, le diré «yo he marcado 200, ¿y tú?».
-¿Cómo se gestó su traslado a España?
-Yo estaba jugando en Recife. Jugaba pachangas, pero, cuando tenía 14 años, un chico me dijo de probar en un club. Como no me gustaba estudiar y pasaba de todo, fui y me quedé. Tras dos años, vino un chico de España con el entrenador del Barça y me dijeron de ir a España, pero por entonces este país tenía fama de pagarte dos meses y luego no hacerlo, así que rechacé. Cuatro meses después, volvieron y lo arreglamos, y aquí sigo.
-Del Alfa 5 al Gasifred. ¿Cómo ha sido la experiencia?
-Me pasó de todo. El Alfa 5 me trató muy bien. Vine con un amigo y subimos al equipo a Plata. Tras un par de años, el equipo se quedó sin patrocinador y bajó. Fui al Gavà y al Barça. Ahí estaba muy bien, pero el Alfa 5 volvió a Plata y, como tenía un contrato de siete años con ellos, tuve que volver. Yo no quería, pero me obligaron. En el Barça podía haber crecido más. Ya está olvidado.
-¿Su sueño era triunfar en el fútbol sala español?
-La verdad es que mi intención era jugar al fútbol. El fútbol sala te da un dinero, pero el fútbol, más. Hice una prueba en el Barcelona, pero sólo miraban a los niños de papá. Me daban tres o cuatro minutos en la pachanga y me decían «vuelve mañana». Yo no iba para perder el tiempo, así que me centré en el fútbol sala.
-¿Cómo llegó al Gasifred?
-Tenía 25 años y acababa de ser padre. En Barcelona, yo jugaba y trabajaba. No disfrutaba mucho de mi hija. Aquí marqué cinco goles y Dudú me llamó para preguntarme si quería venir. El club habló conmigo y siempre cumplió.
-¿Se planteó la retirada tras la lesión de rodilla del año pasado?
-No, pero me fastidió mucho. Bodegas Arzuaga dejó de patrocinar al club, no había dinero y me lesioné en el tercer partido de Liga. Tras un tiempo de recuperación, empecé a jugar y era un partido jugado y otro parado, así que me operé. Sé que había personas que me criticaban, pero también otras que me apoyaban.
-No me creo que en siete años no haya recibido ofertas superiores.
-Sí, he tenido. Recuerdo que en el primer año me llamó el Cáceres, en el que jugó Coria. Ofrecía más que el Gasifred, pero no me muevo por dinero. Si estás solo puedes ir a la aventura, pero mi mujer, hija y yo estábamos a gusto aquí, donde cumplieron lo que prometieron. No me fui por eso. ¿Para qué 1.000 o 2.000 euros más? Si no vas a estar feliz, no vale la pena.
-Entonces está bien en Eivissa. ¿Mejor que en Recife?
-Si tuviera allí el dinero de aquí también estaría bien allá (risas).
-¿Hasta cuándo veremos jugar a Clayton?
-Hasta los 40. Pero si los jefes me dejan lo hago hasta los 70 (risas).
-Además de por ser culé, ¿por qué tiene el himno del Barça en el móvil?
-Cuando estaba en Brasil veía los partidos del Barça en la época de Romario y disfrutaba mucho. Llegué a España, lo vi jugar y desde entonces amo al Barça.
-¿Y por qué no el de Brasil?
-La selección de Brasil ya ha ganado muchas cosas y estoy acostumbrado (risas).
-¿Paulo Roberto o Falcao?
-Falcao es el mejor.
-¿España o Brasil?
-Mitad y mitad.
-¿El mejor jugador del Space Gasifred?
-El que ha marcado 200 goles (risas).