Entrena todos los días de la semana y utiliza sus vacaciones para realizar pruebas de ultrafondo y maratones. Eusebio Noguera dedica su cuerpo y mente a entrenar desde que, el año 2005, hizo su primer Ironman. En estos diez años, el del Club Triatló Santa Eulària no ha parado de superarse participando en pruebas muy duras y exigentes. El objetivo de este año lo tiene claro: «En 12 meses voy a participar en pruebas de los cuatro continentes».
Para el primero de los retos falta menos de un mes. El día tres de abril, Noguera empezará su participación en el Maratón de Sables. Se trata de una prueba de autosuficiencia de 242 km en seis etapas por el Sáhara. Los participantes deberán superar cinco etapas de entre 30 y 40 km, y una de 100, en motivo del treinta aniversario de la prueba que se celebra este año: «Será una etapa durísima que tardaré unas 36 horas en finalizar. Es mi cuarta vez en el Maratón de Sables y aquí lo más importante es tener una buena preparación mental. Hay muchos momentos duros en los que piensas en retirarte y el control mental es necesario».
Después de la Ultra Trail Transvulcania de 80 km, que se celebra en la Palma el 9 de mayo, el día 23 del mismo mes, Noguera se plantará en Lanzarote para participar en el Ironman. Este año, además, el triatleta participará en un segundo Ironman, en este caso en el de Frankfurt el mes de julio, donde celebrará su cumpleaños: «Hacer dos Ironman es una locura pero este año he conseguido plaza para el de Alemania, que es Campeonato de Europa, y no quería perder la oportunidad».
El mes de noviembre Noguera cumplirá uno de sus sueños, participar en la que dicen que es la prueba más dura del mundo, la Everest Trail Race. La cordillera del Himalaya es el escenario de las 5 etapas, que en total suponen 160 km con un desnivel acumulado de más de 30.000 metros. «Son muchos años queriendo ir y como he tenido ayuda de un sponsor me he lanzado de cabeza. Es un sueño poder correr en el Himalaya».
El objetivo de cuatro continentes en 12 meses lo completará en Jordania, con la Transarabia de 300 km, y en Costa Rica, con su participación en la Coastal Challenge en febrero de 2016.
El deporte es una de las prioridades en la vida de Noguera, pero también lo son sus dos hijas. Por eso ha reservado la primera semana del mes de agosto para ellas: «Mis vacaciones las dedico a participar en estas pruebas, pero este agosto me podré llevar a mis hijas a Nueva York, porque sino me matarán».