El HC Eivissa no puede permitirse ningún fallo si quiere soñar. En este esprint final llega a es Pratet (19.30 horas) el Almoradí. Los alicantinos son el claro ejemplo de un lobo con piel de cordero. Llevan una temporada muy irregular y buscas salvar la categoría, pero son un equipo con jugadores de un potencial espectacular. En sus filas juega Rubén Ruiz que es el máximo goleador de la categoría de largo.
Los ibicencos, por su parte, llegan con la moral alta tras ganar en Algemesí en un partido muy complicado. Ese triunfo les ha vuelto a meter en la pelea y buscarán un triunfo que les permita soñar con llegar a una fase de ascenso que está muy complicada, sobre todo teniendo en cuenta que les toca descansar en la última jornada.
Además, los naranjas tienen ganas de revancha. En el partido de la primera vuelta, los pitiusos se dejaron un punto al empatar. Los jugadores por aquel entonces regresaron a la isla con la sensación de que el resultado no era justo y que habían sido perjudicados. Por eso, hoy podrán tener su pequeña venganza.