Desde primera hora de la mañana se veía que algo grande iba a suceder. La carretera de Sant Antoni a Ibiza era un reguero de ciclistas, también las calles de Vila estaban llenas. Sobre las dos ruedas, todos se dirigían hacia el puerto de Ibiza para tomar parte de la decimonovena edición de la Vuelta a Ibiza MTB. Un arco de salida que congregó un millar de participantes entre los que destacaban el nombre de varios ilustres del motor como Marc Coma, Roberto Merhi, Aleix Espargaró o el periodista Antonio Lobato y exciclistas profesionales como Joaquim ?Purito? Rodríguez, Haimar Zubeldia o David López.
Con la lluvia cayendo sobre la salida no quedaba otra cosa que aplicar el dicho: a mal tiempo, buena cara. Desde el primero al último se lo tomaron así, empezando por el director de la carrera Juanjo Planells: «Esto es mountain bike, la lluvia también es bonita, será más épico», aseguró minutos antes de que la ronda diera su salida.
El principal embajador del ciclismo pitiuso, Enrique Morcillo lamentó que las vistas no serán las mismas, pero valoró que la lluvia también viene bien: «Estaba el terreno muy suelto, muy peligroso. Yo creo que la lluvia lo va a dejar en buenas condiciones. No tendremos paisajes espectaculares, pero será divertido igual. Dicen por ahí que cuanto más duro, mejor».
En la misma clave de humor se mostró Purito Rodríguez: «Mojado, lo veo mojado. No pasa nada en cuanto se de la salida entraremos en calor». El que hiciese podio en las tres grandes vueltas del ciclismo debutó ayer y no perdía la sonrisa: «Todo tiene su encanto seguro que lo pasaremos bien en las bajadas».
Por su parte, Marc Coma, cinco veces ganador del Rally Dakar y un habitual de esta carrera, señaló: «No nos acompaña la ?meteo?, pero vamos a disfrutar. Serán días duros, pero nos gusta sufrir». Sobre la prueba propiamente dicha, valoró: «Es una manera de descubrir la isla, cada edición te ofrece alguna sorpresa. Siempre hay algún rincón nuevo que merece la pena de ver».
Otra que suele repetir es Mayalen Noriega, dos veces ganadora de la ronda este año vuelve con las mismas ganas: «Estoy muy contenta de estar aquí y saldremos a ganar». Sobre la lluvia reconoció que no le gusta mucho, pero que no se puede hacer nada: «Es mountain bike, aquí te toca lo que te toca y hay que estar preparado para todo».
Las gotas que caían no ensombrecieron para nada el buen ambiente que se respiraba, viejos amigos que se encontraban en la carrera y otros que buscaban una fotografía con algunos de sus ídolos. Así pasaron los minutos hasta que se dio la salida de la edición más dura de siempre de esta Vuelta a Ibiza.