Mari Pau Huguet finalmente se quedará sin competir, pero podrá disfrutar de la XXXIV Pujada a sa Cala de Sant Vicent. La piloto ibicenca actuará como coche cero y será la encargada de abrir la carrera. Lo hará con un McLaren Senna que no dejará indiferente a nadie.
Huguet que no podrá exprimir al máximo este vehículo que alcanza los 340 kilómetros por hora en circuito, valoró su situación: «Desafortunadamente, el equipo de Talex Motor Sport tuvo un problema personal y no han podido venir a Ibiza. No tenemos coche. He tenido un poco de suerte y, gracias a la cortesía de Tito Vilás, puedo salir de coche cero con este impresionante Senna y así, por lo menos, quitarme el gusanillo y poder asistir».
La campeona de féminas y tercera de la categoría 1 del Campeonato de España de rally de montaña no ocultó su tristeza por no poder ponerle el broche a su temporada con la prueba de casa: «Me hubiese encantando competir. Después de todo el año corriendo, la prueba de casa era el último sueño.
GRAN DEBUT
En cuanto a su estreno en el Campeonato de España, Huguet se mostró feliz por los resultados: «Estoy contenta con mi año. Al final, he sido tercera de la categoría 1 y primera de féminas, algo que no me esperaba. No esperaba estar en el podio en el primer año sin entrenar ni nada. Espero que el próximo año pueda ir mucho mejor».
La ibicenca valoró lo que considera una temporada de aprendizaje: «Este año he aprendido muchísimas cosas. Aquí no podemos entrenar. Vas a la carrera de mes en mes y no sabes muy bien cómo va todo. Vas probando poco a poco. Las sensaciones al volante durante estos meses han sido buenas. He tenido un par de sustos que no han sido culpa mía».
Por último, mostró su intención de repetir en el nacional y lo hizo con ambición. Eso sí, primero tiene que encontrar patrocinadores: «Si consigo el apoyo económico, me gustaría poder volver a hacer el Campeonato de España. Mi objetivo es estar con los mejores y poder llegar a lo más alto».