Llega la hora de la verdad para el ibicenco Nacho Ribas, del Club Atletismo Ibiza (CAI). El atleta comienza hoy, desde las 06.30 horas, su particular reto de bordear todo el perímetro de la isla de Ibiza en 30 horas, lo que supone recorrer una distancia de 185 kilómetros y unos 5.500 metros de desnivel en dos jornadas, una hoy y otra mañana.
El evento, denominado La Vuelta a Ibiza Solidaria, consiste en dos etapas de 15 horas y tiene como fin recaudar fondos para el Banco de Alimentos de Ibiza, que se canalizarán a través de la Asociación Equip Voluntari. Los donativos podrán realizarse a través de la página web de sportmaniacs.com a partir de cinco euros. De momento, ya se han recaudado cerca de 1.000 euros. El plazo de aportaciones permanecerá abierto hasta las 23.00 horas del próximo martes.
El CAI ha publicado en sus redes sociales un enlace para que los interesados puedan seguir en todo momento la trayectoria y geolocalización de Nacho Ribas. El atleta, especialista en carreras de montaña y ultradistancia, tiene previsto costear la isla en el sentido de las agujas del reloj hasta alcanzar la playa de Benirrás en torno a las 21.30 horas.
Mañana retomará el desafío a las 06.30 horas para completar la última parte con meta en el Paseo de Vara de Rey, donde tiene previsto llegar sobre las 19.30 horas. El evento será supervisado y validado por los técnicos de Ibiza Blue Challenge.
Ribas confesó ayer sentirse «tranquilo» de cara al reto. «Empecé la semana con muchos nervios por querer dejarlo todo hecho más o menos, pero, conforme ha ido avanzando la semana, me he ido relajando y la verdad es que estoy bastante tranquilo y con ganas de empezar», declaró el corredor.
El del CAI confía en sus posibilidades de completar el reto: «Estoy bastante confiado. Sé que me va a costar, sobre todo la parte norte. Esa zona es más dura».
Estos últimos días se ha dedicado a descansar después de haber llegado a acumular largas sesiones de entrenamiento anteriormente. «Intenté hacer dobles sesiones e incluso tres en 24 horas, sumando todos los kilómetros posibles. También hice muchas series, pesas y sesiones de gimnasio con el fin de que los músculos no fallen», explicó al respecto.
Pese a la dureza del reto, Ribas se dejará llevar «por las sensaciones». «Todo el mundo me dice que guarde todas las fuerzas posibles. Seguramente, algo guardaré, pero, al final, yo me muevo por sensaciones. Si las piernas funcionan, pues a correr. Cuando no lo hagan, tocará bajar el ritmo», expuso.