Miguel Ángel Guerrero se convirtió este fin de semana en el jugador número 14, el número asociado por siempre al mítico Johan Cruyff, en marcar gol para la UD Ibiza estas temporada. Veintisiete jornadas hicieron falta para que el delantero viera premiado su esfuerzo, ese que le ha llevado a hacerse con una titularidad de la que carecía con regularidad cuando comenzó el curso, el del estreno del equipo ibicenco en el fútbol profesional.
«Guerrero se convierte en el celeste #14 en marcar con el Ibiza». Con estas palabras, el club destacaba en las redes sociales el papel de Guerrero en el partido contra el Cartagena, añadiendo un gráfico con sus siguientes datos en la jornada: un gol, dos pases clave, seis duelos ganados y debut goleador.
El toledano, de 31 años, no es un jugador del que se deban esperar muchos goles a pesar de su posición. Aunque algunos le puedan–con mayor o menor razón– exigir más dianas, lo cierto es que en su trayectoria deportiva no se ha prodigado en ello. La campaña pasada la inició en el Nottingham Forest, donde no marcó en 11 participaciones. Luego, recaló en las filas del Rayo Vallecano, con el que logró el ascenso a Primera División. Con los rayistas jugó 16 encuentros y vio portería en una ocasión.
El mediapunta es un jugador con una capacidad de sacrificio enorme, capaz de abrir espacios y el juego con facilidad, pues cuenta también con una buena visión del mismo. No es un atacante fácil de cubrir para las zagas rivales. Todo eso es lo que viene exhibiendo en la UD Ibiza, un trabajo oscuro que a nivel estadístico no suele reflejarse.
Sus cualidades le permitieron llegar al fútbol profesional con el Sporting de Gijón, con el que ascendió a Primera y debutó en la máxima categoría nacional. Rozó el centenar de partidos con el cuadro rojiblanco (96 concretamente) y marcó 16 tantos. Posteriormente, defendió la camiseta del Leganés, el Albacete y el Olimpiakos. Con este último jugó incluso la Champions League.
Este curso, sus números no son para tirar cohetes, pero son los propios de un futbolista de las características citadas. Es el segundo máximo asistente de la Udé con tres asistencias, las mismas que Sergio Castel. Sólo le supera en este apartado el polaco Mateusz Bogusz, lesionado de gravedad y que se perderá lo que queda de curso.
Su aportación ha ido de menos a más. Con Juan Carlos Carcedo no tenía el mismo protagonismo que ahora. Paco Jémez ha depositado su confianza en él y ha salido siempre de inicio desde la llegada del técnico cordobés. Según la estadística de LaLiga, esta campaña ha contado con 849 minutos, repartidos en 19 jornadas. Sólo lleva un gol, logrado gracias al primero de los dos penaltis transformados por el cuadro celeste en su victoria contra el Cartagena (2-1) el pasado sábado. Además, ha visto una tarjeta amarilla y una roja.
El toledano, titular en los seis partidos de Jémez –saldados con un balance de cuatro victorias, un empate y una derrota–, está cada vez más suelto. Se ha confirmado el despertar de Guerrero.
El dato
Primera visita al Heliodoro Rodríguez
La UD Ibiza visitará este sábado (16.00 horas) por primera vez en su historia el Heliodoro Rodríguez López para enfrentarse al Tenerife en la vigesimoctava jornada de Segunda División. El conjunto celeste se estrenó esta temporada en la categoría de plata del fútbol español y en el encuentro disputado en la ida en Ibiza se firmó un empate a cero. El cuadro de Paco Jémez es el segundo equipo que esta temporada disputa su primer encuentro en el Heliodoro Rodríguez López tras el Amorebieta.
El apunte
La ‘Udé’ de Paco Jémez suele ganar la batalla por la posesión a sus rivales
En la era Jémez, laUD Ibiza suele ganar la batalla particular por la posesión del balón. En cuatro de los seis encuentros que ha dirigido el cordobés, la Udé ha salido victoriosa en este apartado. Solamente contra el Almería (51’8% contra 48’2%), a domicilio, y el Cartagena (49’1 % frente a 50’9 %), como local, no se impuso en esta estadística. En los tres primeros choques con el nuevo míster, el equipo celeste superó el 60 por ciento de posesión, con un 70,2 como mejor registro (contra el Alcorcón). En la salida a Málaga, los unionistas firmaron un 55’1 % de posesión.