La UD Ibiza rinde visita al campo de un Mirandés que puede respirar ya tranquilo después de haber certificado en la noche del viernes su permanencia en Segunda División. La derrota de la RealSociedad B contra el Almería permite a los rojillos encarar el choque liberados de presión y con el único objetivo de poner fin a su mala racha de cuatro derrotas seguidas y brindar una alegría a su afición. Los celestes, con las tareas hechas hace tiempo, buscarán también los tres puntos para tratar de alcanzar la novena plaza, el techo clasificatorio al que aspiran.
Paco Jémez no podrá contar para el choque de hoy con tres hombres:Javi Pérez, SergioCastel y Manu Molina. Este último sufre unas molestias que le impiden entrar en la convocatoria. El delantero, en cambio, se ha ejercitado a lo largo de la semana, pero no ha sido citado al considerar el míster que no está físicamente al mismo ritmo que otros.
El técnico celeste quiere que los suyos dejen el mejor sabor de boca posible en esta recta final del campeonato liguero. Así las cosas, no cabe duda de que plantará sobre el terreno de juego el mejor once posible, con Ekain y Herrera como intocables en la parte delantera. El vasco mantiene un idilio con el gol en las últimas semanas y el canario es el pichichi del equipo, además del jugador más desequilibrante.
Más problemas para encontrar el gol está teniendo el conjunto mirandesista. No en vano, encadena cuatro jornadas consecutivas sin ver portería. El posible regreso de Alejandro Marqués, que esta semana pudo ejercitarse tras superar unas molestias en el aductor, podría ser la solución a esos males. El propio Joseba Etxeberría, míster de los castellano-leoneses, confirmó este sábado que dicho ariete «está recuperado y disponible» para este partido, si bien no desveló si saldrá de inicio en un partido intrascendente para ambos conjuntos.