El español Esteve 'Tito' Rabat (Kalex) logró su cuarta victoria en la categoría de Moto2 al imponerse en el Gran Premio de Catar que se disputó en Losail, donde Luis Salom acabó decimoquinto.
Rabat se impuso en un apretado final al japonés Takaaki Nakagami (Kalex) y a su propio compañero de equipo, el finlandés Mika Kallio.
El japonés Takaaki Nakagami sorprendió al líder de los entrenamientos, el español Esteve «Tito» Rabat (Kalex), que se dejó superar también por el alemán Sandro Cortese (Kalex), quien a pesar de la fractura de astrágalo se dio descanso durante los últimos entrenamientos libres y decidió disputar la carrera.
Además de ellos, tanto el finlandés Mika Kallio (Kalex) como el suizo Thomas Luthi (Suter), se colaron al español en sus aspiraciones, pero por poco tiempo.
A ritmo de vuelta rápida Nakagami tiró con fuerza en cabeza de carrera y abrió un pequeño hueco seguido tan sólo por Mika Kallio, que replicó el ataque de su rival nipón con otra vuelta rápida, en tanto que Rabat superaba a Cortese y se ponía tras la estela de Luthi, al que superaba poco después.
El tercer clasificado del pasado año en la categoría estaba ya delante del grupo perseguidor y a poco más de un segundo de diferencia de sus rivales mientras Cortese y Luthi iban perdiendo fuelle y el italiano Simone Corsi (Forward Kalex), les neutralizaba y superaba en la cuarta vuelta.
Por entonces ya se habían quedado fuera de carrera en una caída multitudinaria cuatro pilotos, el sanmarinense Alex de Angelis (Suter), el belga Xavier Simeon (Suter), el francés Johann Zarco (Caterham Suter) y el estadounidense Josh Herrin (Caterham Suter).
Nakagami vio como una vuelta después ya tenía a los dos pilotos de Marc VDS, Kallio y Rabat pegados al rebufo de su moto, con el italiano Corsi en tierra de nadie y peleando por la quinta plaza un grupo encabezado por el también italiano Mattia Pasini (Forward Kalex) pero ya a más de cuatro segundos.
Algo más atrás, el campeón del mundo de Moto3, el español Maverick Viñales (Kalex), también recuperó posiciones desde la quinta línea en la que tuvo que salir y en el octavo giro ya era octavo, en el mismo grupo que los suizos Thomas Luthi y Dominique Aegerter (Suter), quien a cinco vueltas del final rompió el motor y tuvo que abandonar, y el británico Sam Lowes (Speed Up), al que poco después dejó atrás.
Cortese, evidentemente limitado por su rotura de astrágalo, fue perdiendo posiciones en pista, si bien al final logró una meritoria octava plaza, y fuera de ella se vio penalizado con un punto en su carné por considerar dirección de carrera que durante los entrenamientos, infringió el Artículo 1.21.2 al rodar más lento de lo necesario con peligro evidente para el resto de rivales.
Sobre el asfalto Takaaki Nakagami mantuvo firme su ritmo y no cedió ante los ataques de Kallio y Rabat, que quizás esperaban su oportunidad para lanzar el ataque definitivo.
Pasado el ecuador de la carrera, en el undécimo giro, se produjo la primera novedad al superar «Tito» Rabat a su compañero de equipo para colocarse tras la estela de Nakagami, quien dio un pequeño tirón para intentar, sin éxito, aumentar su ventaja.
No dudó demasiado Rabat en continuar su iniciativa ya que al principio del decimotercer giro y en la frenada de final de recta superó a Nakagami y se puso por primera vez líder de la carrera, pero con sus dos rivales literalmente pegados a él.
Desde ese momento Rabat ya no abandonó la primera plaza y aunque Nakagami lo intentó hasta la bajada de la bandera de cuadros no pudo con su rival y se tuvo que conformar con la segunda posición.
Mención especial se merece el también español Maverick Viñales, que no se amilanó en su paso tras proclamarse campeón del mundo de Moto3 el pasado año y tras desbancar a no pocos rivales desde la decimocuarta posición que ocupó en la formación de salida logró una más que meritoria quinta plaza tras el suizo Thomas Luthi.
En el capítulo de abandonos de pilotos españoles, Axel pons (Kalex), lo hizo por caída, en tanto que Nicolás Terol se tuve que retirar con problemas en el motor de su Suter.