David Bustos quiere revancha. Y la tendrá, toda vez que, tras ser derribado en las clasificatorias, hoy (15:05 horas, Teledeporte) correrá la final de los 1500 metros de los Campeonatos de Europa de atletismo de Zúrich (Suiza).
El mallorquín, residente en la actualidad en Torrelavega, donde entrena a las órdenes del medallista olímpico José Manuel Abasca, defiende el bronce conseguido hace dos años en Helsinki, pero saltará al tartán en su mejor estado de forma y motivado tras la segunda oportunidad que le brindaron los jueces.
Además, Bustos será el único español en liza en la final. Eliminados el vigente campeón nacional, el sevillano con licencia balear Manuel Olmedo, y el segundo clasificado el estatal, Adel Mechaal, todas las miradas se centrarán en el olímpico isleño.
Bustos presenta la octava mejor marca del año entre los catorce atletas que tomarán la salida. El mediofondista mallorquín ha firmado en 2014 3:35.59 (su mejor parca personal es de 3:34.77, en 2012) y tendrá mucha competencia, tanto si se encuentra con una final lenta y más táctica, como en una rápida. El último tramo de David Bustos es su principal carta de presentación en caso de llegar a la curva final en el grupo de cabeza.
Fiable
El pupilo de Abascal no descarta nada, pero deberá plantar cara al oponentes de entidad, como el vigente campeón, el noruego Henrik Ingerbrigtsen, que en 2014 ha conseguido su mejor registro personal (3:31.46) o el alemánHomiyu Tesfaye (3:31.98).
Las opciones de Bustos están abiertas, dadas sus condiciones, y el mallorquín quiere volver a pisar el podio para sacarse la espina de los recientes Campeonatos de España y confirmar lo de hace dos años.