El presidente del FC Barcelona, Josep Maria Bartomeu, tendrá que declarar el próximo viernes ante el juez Pablo Ruz imputado por un delito fiscal en el fichaje del brasileño Neymar correspondiente al ejercicio de 2014, del que también tiene que responder el Barça como persona jurídica.
El juez ha citado a Bartomeu y a un representante legal del club (el primero está emplazado a las 11.00 horas y el segundo media hora antes) tras recibir un informe de Hacienda en el que calcula un fraude de 2,8 millones de euros por parte del presidente y del club en 2014, con lo que al Barça se le imputan ya tres delitos fiscales.
Lo ha hecho dentro del caso sobre el fichaje del brasileño Neymar, en el que Ruz ya ha imputado al expresidente del club Sandro Rosell y al Barça por dos delitos fiscales de los años 2011 y 2013 y, en el caso del primero, además un delito societario.
De esta manera, Bartomeu es el segundo presidente del Barça imputado en esta causa después de Rosell, que dimitió cuando se conoció su imputación, cosa que el actual presidente ha dicho que no hará.
Según Ruz, en el caso de Bartomeu concurren «indicios suficientes para la investigación acerca de la posible comisión de un nuevo delito contra la Hacienda Publica en lo relativo al IRPF correspondiente al ejercicio de 2014».
El informe de Hacienda asegura que el Barça dejó de pagar en el ejercicio de 2014 2,6 millones de euros por los 5 millones que derivan «del contrato de reconocimiento de incumplimiento del contrato de 2011 por el FCB, firmado en Barcelona el 3 de junio de 2013» por el que el club reconocía la obligación de pago a Neymar de 40 millones de euros.
A ese contrato se le añadió el 31 de julio de 2013 una adenda de modificación de las fechas de pago, estableciéndose como último pago esos 5 millones el 30 de enero de 2014.
Según el fiscal José Perals, el Barça estaba entonces obligado el pasado año a «practicar la retención a cuenta por el IRPF, pues el jugador ya es residente fiscal en España en ese año», y Hacienda afirma que el club no ha hecho esa retención, cifrada en 2,6 millones.
Además, Perals indica que el Barça también dejó de pagar en 2014 234.000 euros de los 900.000 por temporada derivados del contrato de imagen y otros 11.700 euros por los 22.500 que según el contrato de representación debe abonar el club al agente de Neymar, en este caso su padre.
Todas esas cantidades suman un total de 2,8 millones defraudados en 2014 «a la Hacienda Pública por el FC Barcelona y por sus actuales dirigentes, siendo el presidente del club Josep Maria Bartomeu».
Según Hacienda, por el fichaje de Neymar el club pagó un total de 82.743.485 euros, incluyendo varios contratos que sirvieron para contratarle y que se enmascararon con otros conceptos, por los que el Barça tendría que pagar ahora a Hacienda 12.148.696 euros más.
De esta manera, el fichaje del brasileño le ha costado al club catalán 94.892.181 euros, sostiene la Agencia Tributaria.