La capitana española de Copa Davis, Gala León, ha dimitido este domingo de su cargo tras las declaraciones de este sábado de Rafa Nadal en las que lamentaba «el show mediático» de la Real Federación Española de Tenis, una dimisión que no ha sido aceptada por José Luis Escañuela ni por la presidenta en funciones de la RFET, Olvido Aguilera.
Según fuentes cercanas a la seleccionadora, Gala León presentó su dimisión apenas unas horas después de que Nadal, en rueda de prensa en el torneo de Wimbledon, lamentase el pobre espectáculo que está protagonizando el tenis español.
«La situación está fatal. Se ha montado un show, el espectáculo que se está dando últimamente me parece lamentable. Bajo ningún caso creo que el tenis español lo merezca después de estos últimos 20 años», explicó el balear a raíz del cruce de acusaciones desde el nombramiento de Gala León como capitana y los últimos sucesos en la Federación, con la inhabilitación el miércoles durante un mes a Escañuela por parte del TAD y ante la falta de transparencia en las gestiones que demanda el CSD.
En su rueda de prensa, Nadal destacó el malestar de la mayoría de los tenistas españoles -David Ferrer o Feliciano López también lo hicieron esta semana-, por el daño que consideran está sufriendo el tenis español. Después de la comparecencia de Nadal y de la ausencia de los jugadores a una reunión que había convocada junto con Olvido Aguilera, este domingo Gala León presentó su dimisión.
Sin embargo, y a escasas tres semanas (del 17 al 19 de julio) de disputar la eliminatoria de Davis ante Rusia, ni Aguilera ni Escañuela, con quien mantuvo una conversación telefónica, aceptaron el cese en su cargo ya que consideran irrenunciable que se siente en Rusia y después se valore su trabajo.