El PP ha vuelto a presentar una enmienda a una ley –la de mecenazgo cultural– que modifica otra ley, la de Presupuestos, que no tiene nada que ver con el tema.
Es la segunda ocasión en menos de quince días que el PP utiliza una artimaña para cambiar una ley que lleva 26 días en vigor. Los letrados del Parlament ya han advertido de que no se puede hacer.
El artículo 118 del reglamento del Parlament lo dice claramente: «La Mesa de la Comisión solo admitirá a trámite aquellas enmiendas cuyo contenido guarde relación con la materia de la denominacion del proyecto de ley, excepto acuerdo contrario de la mesa por unanimidad».
En este caso, la enmienda del PP corrige un error de los Presupuestos que nada tiene que ver ni con el mecenazgo cultural ni con otras medidas tributarias. El texto que entró en vigor el pasado 1 de enero limitaba a 24 horas lectivas el máximo que podían impartir los docentes de la concertada. La enmienda del PP amplía este límite pasándolo de 24 a 32 horas para garantizar los derechos adquiridos de estos docentes, según informó un portavoz de la Conselleria d'Educació.
El Govern asegura que la enmienda está justificada porque se trata de una medida de reactivación económica, al igual que la ley de mecenazgo.
A todo esto, el tema está en que a una personas se les deja tener un sueldo y medio cobrando dinero público. Son algunos profesores de concertada, entre ellos unos cuantos liberados sindicales de un sindicato de derechas. Lo cual está muy bien en tiempos de crisis: mientras muchos titulados se quedan sin su plaza o no pueden completar jornada, estos sindicalistas cobran hasta una jornada y media.