Los propietarios de viviendas de alquiler turístico que presenten documentación falseada y no puedan subsanar las deficiencias podrán ser multados por la Conselleria de Turisme que, a su vez, se quedará con parte del dinero de la compra de plazas de estos propietarios. Así lo indicaron ayer fuentes del departamento que dirige Bel Busquets, al tiempo que explicaron que, a diferencia de la época pasada, los inspectores requerirán a los propietarios toda la documentación a los pocos días de presentar la Declaración Responsable de Inicio de Actividad Turística (DRIAT).
En la actualidad, los propietarios que quieran dar de alta sus viviendas para dedicarlas al alquiler turístico, una vez obtenido el certificado municipal de que se encuentra en una zona apta, deben proceder a la compra de plazas, trámite que se realiza en la Conselleria y que no es inmediato. Una vez que se ha ingresado el dinero en el banco, ya se puede presentar la DRIAT junto a la documentación requerida por Turisme y que recoge la Ley aprobada el pasado verano. A partir de este momento, se puede empezar la comercialización de la vivienda, si bien, la novedad radica en que a los próximos días los inspectores requerirán al propietario que se presente al Parc Bit, en las oficinas de ordenación turística, para que presente todos los documentos. En caso de que existan errores no subsanables perderá las plazas adquiridas, parte del dinero abonado por éstas y podrá ser multado.
Los propietarios pueden dar de alta de nuevo viviendas de alquiler turístico desde el 30 de julio. La consellera Bel Busquets indicó ayer que hay «normalidad», que no se han producido avalanchas y que mucha gente solicita información.