La Asociación Española de Fabricantes de Vehículos y Camiones Anfac ha denunciado ante la Comisión Europea y ante el Consejo para la Unidad de Mercado, dependiente del Ministerio de Economía y Empresa, el proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética de Balears, según el cual se prohíbe la entrada de vehículos diésel en las Islas a partir del año 2025 y de gasolina el 2035. El objetivo del Govern es tener el 100 % del parque móvil descarbonizado en 2050.
Sin embargo, esta norma ha contado con el rechazo del sector automovilístico desde el principio y la patronal estatal de concesionarios Faconauto también mostró ayer su apoyo a la denuncia presentada por Anfac. Los fabricantes de coches señalan, en sus escritos de denuncias, que las medidas del Govern son «arbitrarias, inidóneas y desproporcionadas», además de estar «huérfanas de cualquier respaldo técnico o científico» y suponer «un claro incumplimiento del derecho de la Unión Europea, así como de la Ley española de garantía de la unidad de mercado».
Desde la Conselleria de Energia defendieron ayer el contenido del proyecto de ley, que está en tramitación parlamentaria y que «no ha recibido ninguna enmienda a la totalidad». Indicaron que propone medidas en línea con el resto de países de la UE.