El año en que por fin debía desplegarse el Régimen Especial de Baleares empezará sin que, por ahora, entren en vigor las medidas que deben servir para compensar la insularidad. La norma que Baleares envió al Gobierno para su aprobación debía comenzar a ser efectiva a partir del 1 de enero de 2020, pero su eficacia queda aplazada a la espera de que se forme Gobierno.
No habrá, por ahora, medidas fiscales para compensar a las empresas. La parte fiscal del REB se cayó del texto general que llegó al Congreso tras una aprobación urgente del Gobierno vía decreto ley. Esa vía, la del decreto ley, no puede utilizarse para aprobar medidas fiscales, por lo que toda la parte tributaria quedó fuera del texto.
Para que tenga eficacia, el Gobierno debe aprobar un nuevo proyecto de ley que debe enviar a las Cortes para su aprobación definitiva. La tramitación es larga y se da por hecho que las rebajas fiscales ya no estarán en vigor tampoco en el año 2020 y habrá que esperar al menos un año para que la norma entre en vigor.
Tampoco habrá, por ahora, fondos para compensar la insularidad en las inversiones. Es el llamado factor de insularidad, que garantiza por ley que Balears recibirá un plus inversor del Gobierno que le coloque en la media estatal.
Pendientes del Presupuesto
Sin embargo, para que entre en vigor el factor de insularidad, primero debe haber un Presupuesto y eso es algo que por ahora no está claro. Primero debe formarse el Gobierno y después debe llegar la aprobación del Presupuesto y a partir de ahí se abrirá un proceso de negociación para determinar en qué se invertirá ese dinero. Si hay problemas, el plus inversor puede que tampoco llegue el año que viene.