La evolución de los depósitos bancarios durante el primer semestre ha superado todas las previsiones de las entidades que operan en Balears. Los últimos datos del Banco de España reflejan que si a finales de marzo había en los bancos de las Islas un total de 29.398 millones en depósitos, en tan solo tres meses la cifra llegó a los 31.319 millones, es decir casi 2.000 más.
Este volumen de depósitos supone batir un récord más en cuanto a actividad económica. Desde el Banco de España reflejan que en Balears nunca se había registrado un cifra tan elevada en los últimos diez años. Desde las entidades afirman que el récord «se ha producido porque las Islas, dentro de su asignación de los fondos europeos, están en cabeza a nivel autonómico en ejecución de los mismos y esto impacta en los datos de la economía real».
Fundació Impulsa e ISBA
El director general de la sociedad de garantía recíproca ISBA, Jesús Fernández, apunta que el nivel de liquidez empresarial ha aumentado por esta circunstancia «pero muchas empresas, al mismo tiempo, han optado por recibir los créditos ICO y fondos comunitarios para pagar deudas». Fernández añade que la evolución de la temporada, principalmente desde Semana Santa «ha superado las previsiones, pero el impacto de la inflación y del encarecimiento de los costes energéticos y productos ha generado una dinámica en la que las empresas buscan la máxima liquidez para no tener problemas a lo largo de los próximos meses».
Asimismo, destaca que a lo largo de 2023 «habrá más demanda de crédito, ya que muchas empresas llevan tres años sin realizar inversiones por efecto directo de la pandemia». El director técnico de la Fundació Impulsa Balears, Antoni Riera, reconoce que el aumento de los depósitos está estrechamente ligado a los créditos ICO y «a las ayudas del Govern con los fondos comunitarios». Añade que el objetivo fundamental «es poder afrontar un escenario marcado por la incertidumbres y problemas geopolíticos en mejores condiciones».
El sector bancario y analistas señalan que es más factible afrontar una coyuntura compleja y con tantos intangibles «con la mochila llena». Riera, respecto al ahorro de las familias, indica que la evolución de los depósitos «crece porque muchas familias no habían desenjaulado el ahorro que tenían contenido».
Rentabilidad
En este punto, hay bancos que aprecian un cambio de tendencia en el ahorro de los clientes particulares, al margen de las empresas. De este modo, según las entidades financieras, puntualizan que los clientes son conscientes de las subidas de tipos y están demandando mayor rentabilidad a sus ahorros, que ahora mismo los tienen mayoritariamente en cuentas a la vista. Por otro lado, señalan, la situación de mercado aleja a los clientes más conservadores de otros productos de ahorro con riesgo como los fondos de inversión.
Tanto es así, que los bancos atienden el interés de los clientes porque ese movimiento de vista a plazo les permite estabilizar los recursos de sus balances, pero lo harán de forma contenida sin ofrecer tipos de interés muy agresivos. Este escenario es probable que cambie a partir del segundo trimestre de 2023 y que la subida de tipos de interés se traslade a los clientes en los intereses de los depósitos de una forma más contundente. En cualquier caso, será clave ver la evolución de los depósitos bancarios en el tercer trimestre, puesto que el incremento de los costes productivos también tendrá su impacto en el ahorro de empresas y familias.