Y también degustaban los helados. La Policía Nacional ha detenido a una española y una rumana que robaron durante dos meses a diario en una conocida heladería de La Lonja, en Palma. Una de ellas había recibido el finiquito hacía diez días y la otra también había trabajado allí y había sido despedida.
Ricardo Falcone, el propietario de la Heladería Rivareno, una de las más visitadas de Palma, explicó este martes a Ultima Hora que las mujeres accedían al local una vez que estaban cerrados al público, gracias a una copia de la llave de la puerta que hicieron. En el establecimiento hay cámaras de seguridad, pero solo eran revisadas en horario laboral, por lo que no se supo que durante dos meses entraban y robaban pequeñas cantidades hasta que, de forma accidental, se revisó una grabación y se destapó el asunto.
Según parece, las dos chicas, de 23 años de edad, salían a practicar ‘running' por el Paseo Marítimo de noche, para disimular, y cuando pasaban por delante del local entraban rápidamente y sustraían pequeñas cantidades de la caja. Luego, probaban algunos de los helados y se marchaban. Así durante dos meses. También contactaban con los empleados del otro local de la calle Fábrica para conocer el horario del personal de La Lonja.
Falcone cuantificó el dinero sustraído «entre 10.000 y 15.000 euros» y explicó que tras visionar los vídeos de seguridad, en la noche de ayer, él y otros empleados esperaron a las dos ladronas. Las dos jóvenes, como hacían cada noche, volvieron a la heladería, pero en esta ocasión cayeron en la trampa. El empresario llamó a la Policía Nacional, que envió a una patrulla y detuvo a las dos sospechosas. Una de ellas sufrió un ataque de ansiedad. La otra parece ser que tiene antecedentes por otros delitos. Al ser sorprendidas, se quedaron heladas. Nunca mejor dicho.