La presidenta del Govern, Marga Prohens, ha defendido en Bruselas la necesidad de un régimen específico para las islas de la Unión Europea en la aplicación del Reglamento de Mínimis, que permita la exención a la norma general, específicamente en el transporte de mercancías o elevar el umbral con el objetivo de compensar la insularidad y los sobrecostes derivados.
La líder del Ejecutivo autonómico ha intervenido en el Parlamento Europeo en el debate sobre las cuestiones locales de la Unión y sobre la flexibilidad de las normas sobre ayudas estatales para los territorios insulares.
Prohens ha argumentado que la modificación del reglamento del año pasado y la ampliación del límite de 200.000 a 300.000 euros durante tres años de la cuantía máxima a percibir sigue sin contemplar unas reglas claras que tengan en cuenta las especificidades de las regiones insulares.
La presidenta ha señalado que el reglamento solo hace una mención a las regiones ultraperiféricas e insulares reconociendo que son casos concretos que se deben evaluar, pero sin una mayor concreción.
«Aplaudimos el aumento del límite máximo de las ayudas y la ventana de oportunidades que supone, pero no deja de ser insuficiente para atender a las necesidades de las regiones insulares y garantizar la competitividad de las empresas», ha añadido.
Prohens se ha referido a las estimaciones que apuntan que el sobrecoste del transporte por insularidad se sitúa entre el 74% y el 100%, respecto del intercontinental, lo que encarece la provisión de materias primas, bienes intermedios, de inversión y de consumo, así como de las exportaciones agrícolas e industriales e imposibilita a las empresas del archipiélago competir en igualdad de condiciones en el mercado único.
«Es el momento de pasar de las palabras a los hechos en el reconocimiento de la singularidad de los territorios insulares de la Unión Europea», ha concluido.