La iglesia de Santo Domingo se llenó ayer tarde en la clausura de la VII edición del Festival de Música «Formentera i Eivissa 2000» en un acto que, como estaba previsto, ofreció la Orquestra Simfònica de Balears. El concierto corrió a cargo del director valenciano Alvaro Albiach, encargado del programa que interpretaron los 74 profesores que integran la que actualmente es la primera orquesta de las Islas.
Los asistentes, más de un centenar de personas, pudieron disfrutar de la Sinfonía en re mayor K95 de Wolfgang Amadeus Mozart, así como de la «Serenata número 2 en re mayor op. 44», de Antoni Dvorak.
Estas fueron las obras que se interpretaron en la primera parte del concierto, que comenzó sobre las seis y media de la tarde. En su segunda parte, la orquesta tocó la «Sinfonía número 6 en fa mayor op. 68», de Ludwig van Beethoven.
Alvaro Albiach, de 32 años, cuenta pese a su juventud con reconocimiento europeo por los galardones que ya ha obtenido. El director que ayer cerró la VII edición del Festival logró en 1998 diploma de la Academia Musicale Pescarese y un año después obtuvo el Gran Premio del Jurado, así como el Premio del Público en Besançon.