«Me gusta escribir cuentos sobre lo que la gente piensa pero no dice; así la descoloco. Con estas palabras resumió su intención literaria Kees Harmsen, quien recibió el lunes el primer Premi 'Sant Jordi' de Narrativa, que convoca el IES Algarb, donde acaba de terminar cuarto curso de ESO. Su relato breve (el primero que presenta en un concurso) se titula «Paranoia» y «va de un chico que siempre está dándole vueltas a la olla con todo y sin contárselo a nadie; ve una bolsa en el patio del instituto y le entra la paranoia pensando qué puede haber dentro una bomba... Al final es cierto, explota y mata a 200 alumnos», explicó ayer a este periódico.
En cuanto al segundo premiado en el concurso, Ben Clark, es estudiante de bachillerato en el IES Isidor Macabich y, aunque bien conocido y premiado como poeta, era la primera vez que se atrevía con un relato. «Lo escribí y me presenté para ver si me salía y averiguar cómo lo valoraba un jurado», señaló. Su texto («La Piràmide»), «invita al lector a entrar en un cuadro donde se desarrolla una historia protagonizada por un anciano, un niño y una pirámide hecha con botellas. El final tiene un cierto aire de melancolía».
Hijo de holandeses, Harmsen nunca ha tenido problemas con el catalán. «Me trajeron a la isla a las cuatro semanas de nacer y siempre he vivido en Sant Josep; tanto mis padres como yo hemos querido integrarnos completamente en la isla, y nunca he tenido problemas de relación ni con la lengua; la he aprendido como una más de las que sé: holandés, inglés, castellano, catalán, un poco de alemán, y ahora estoy estudiando francés». Por su parte, Clark nació en Eivissa de padres ingleses y tampoco ha tenido ningún problema lingüístico. «Hablo inglés, catalán, castellano y un poco de francés; al aprender varios idiomas a la vez no encuentras ninguna diferencia entre ellos», explicó.
Ambos escritores noveles ignoran aún qué estudiarán cuando terminen el bachiller. Kees Harmsen ama el teatro e intentará hacerse actor, pero «por si me falla la cosa o no valgo para las tablas igual estudio Empresariales o algo así». También Ben Clark tiene pasión por el teatro, y colabora con varios grupos de la isla, además de los cursos que ha hecho en Fila Zero, pero «tampoco tengo claro aún qué estudiaré». ¿Le queda tiempo para vivir? «Pues sí, y para escribir de vez en cuando», precisó.