La galería Van der Voort acogerá a las 20,00 horas la inauguración de la primera exposición en Eivissa de Joan Cortés (Pollença, 1964), formada por una selección de sus esculturas, algunas en el suelo y otras colgantes. «Siempre he trabajado con materiales humildes, a través de los cuales expreso un lenguaje estético lo más enriquecedor posible», explicó ayer el artista a este periódico. El encuentro entre la obra de Cortés y Cati Verdera, responsable de la galería ibicenca, se produjo en la feria internacional de arte Arco de Madrid, en la que el artista ha participado en varias ocasiones. El espacio particular de la Van der Voort no ha sido óbice para instalar las esculturas. «Es un espacio contundente, desde luego, pero como la piezas que presento son blancas, se produce una integración que lo acepta muy bien, funciona», precisó.
Hasta llegar a las esculturas que ahora muestra en Eivissa, Cortés ha seguido una elaborada evolución: «Empecé con figuras humanas, luego pase a una historia de animales y, simplificándolos, llegue a las formas que estoy haciendo ahora» «También, en contacto con el ambiente mediterráneo he realizado formas de b arcos y de vegetales, adaptándolos siempre a mi lenguaje».
En opinión de Miguel Cereceda, Joan Cortes sabe combinar «los mejores elementos de la tradición escultórica ya clásica de la modernidad: el dibujo en el espacio de Julio González y las formas en movimiento de Alexander Calder; los penetrables de Jesús Rafael Soto y la elegancia del diseño espacial de la tradición minimalista». Con algún galardón por su trabajo, el escultor ha presentado sus trabajos sobre todo en Mallorca, aunque también en Barcelona, Arco y en el Art Frankfurt.