Si el Pla de Foment de la Lectura que impulsa el Govern ha tenido algún efecto, éste ha sido mínimo. Los datos de la encuesta de hábitos de lectura presentada ayer por la Conselleria de Cultura, con datos correspondientes a 2009, revelan que un 40,4% de la población de Balears no lee nunca. Índice que, desglosado por islas, apunta que las Pitiüses, con un 58% de lectores, son las islas que menos leen de todo el archipiélago. Quedando en primer lugar Menorca, con un 62,3%, seguida de Mallorca, con un 58%.
Por lo tanto, casi la mitad de la población balear no lee ni libros, ni periódicos, ni diarios digitales ni cualquier otro soporte. Los datos de la primera encuesta, referida a 2008, situaron el porcentaje en el 43,3%. La encuesta refleja un pequeño aumento de los lectores habituales (pasan de un 39,6% a un 41,3) y de los ocasionales (crecen del 17,1% al 18,4%). Cabe reseñar que el margen de error de la muestra, elaborada por Gadeso, es del 2,9%.
El sondeo refleja que la población que lee lo hace por placer (84,6%) y para estar informado (58%). Los que no cultivan la lectura alegan falta de tiempo como la principal causa (58,6%). Destaca el aumento de los que culpan al «elevado» precio de los libros. El porcentaje pasa del 8% al 14% en sólo un año, hecho que los responsables del estudio atribuyen a la crisis económica.
Lenguas
Prácticamente la totalidad de los lectores (93%) afirman que leen en castellano, mientras que el 25,3% lo hace en catalán. Eso significa que, respecto al total de población, sólo el 15,1% de los baleares lee en catalán. En cuanto al número de libros leídos por persona y año, la media baja ligeramente hasta los 9,2 títulos. Los jóvenes entre 14 y 34 años son los que pasan más horas leyendo, mientras que el mayor porcentaje de no lectores se encuentra en la franja de 55 a 65 años, donde el 47% de la población no lee.
El presidente de Gadeso, Antoni Tarabini, explicó que el colectivo de 'no lectores' ha perdido peso porque hay más gente que «lee el periódico en el bar o la edición digital de los periódicos». Los lectores habituales suben por el efecto de los bestsellers. El director general de Cultura, Pere Joan Martorell, reconoció que «una persona que no lee a cierta edad es difícil que comience». Así, apostó por crear «hábitos» entre los escolares.
La conclusión a la que ha llegado la Direcció General de Cultura, tras estudiar los datos sobre los hábitos de lectura de las Islas, es que «resulta necesario continuar con las acciones del Pla de Foment de la Lectura y reforzar las actuaciones en Eivissa y Menorca, así como mejorar su visibilidad, para que los ciudadanos tengan un conocimiento mayor de los distintos programas» que tratan de incentivar el gusto por la lectura; sobre todo en la infancia y en la juventud, sectores claves de cualquier sociedad.
Algunos datos obviados y desconocimiento de iniciativas
El estudio de los hábitos lectores de 2009 no actualiza dos datos que causaron gran sorpresa en el sondeo anterior. Entonces, el 58 % de la población fue incapaz de nombrar a un autor en lengua catalana. El 23,6% pudo señalar sólo a uno. Otro dato que en esta ocasión también se ha omitido es el porcentaje de gente que puede leer fluidamente en catalán. En 2008, el 78,7 por ciento de los lectores reconocían que podían leer en catalán, aunque en la práctica sólo lo hacía un 20,7%.
Lo que sí revela este estudio sobre los habitos de lectura en las Islas es el grado de conocimiento de algunas de las medidas integradas en el Pla de Foment de la Lectura, como el programa Escriptor de l'Any (lo conoce el 32,1% de la población), Paraula de... (16,7%), las Converses a Formentor (16,5), Tasta'm (1,3%), Sales d'espera (1,8%), Clubs de lectura (2,8%) o Agenda (1,7%).