La controversia por el estado de conservación del acueducto romano de s'Argamassa no ha acabado con el inicio de los trabajos de rehabilitación de los restos sino que se extienden a su entorno con una nueva denuncia: la ocultación de lo que queda de una villa bizantina bajo el voladizo de una vivienda de la urbanización de la zona.
Esta construcción está a diez metros del acueducto romano de s'Argamassa. Según fuentes vecinales, se trata de un yacimiento de gran importancia que figura entre los bienes recogidos para su protección por el Consell d'Eivissa, pero denuncian que no se hace nada por darle valor y recuperarlo. De hecho, este mismo verano realizaron una serie de pancartas destinadas a dar a conocer el hecho. Fueron colocadas en la valla de protección de la zona, que impiden cualquier tipo de inspección directa de los restos.