Un total de 4.647 jóvenes de 18 años de Baleares han solicitado el Bono Cultural Joven para beneficiarse de productos y experiencias culturales a través de la tarjeta prepago de 400 euros. Según han informado desde Delegación del Gobierno, en su primera edición, este vale ha sido solicitado a nivel nacional por 281.557 jóvenes de toda España que cumplen 18 años en 2022, lo que supone el 58,65 por ciento de la población estimada de esa edad (480.000 personas en total), atendiendo a datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
El pasado lunes, último día para la solicitud de adhesión al programa, se registraron 15.206 registros en todo el país. Para facilitar el proceso en esas últimas horas, los empleados de las oficinas de Correos recogieron en mano las solicitudes y, actualmente, se están volcando en la plataforma del Bono Cultural Joven, lo que podría aumentar ligeramente las cifras. Desde el inicio del proceso de solicitud del Bono Cultural, 225.153 jóvenes eligieron la inscripción digital a través de la página web, mientras que 56.404 lo hicieron en una oficina de Correos.
En este sentido, el Ministerio de Cultura y Deporte ha hecho un balance positivo de esta iniciativa, porque «muestra el interés de un amplio espectro de la población joven española por la cultura y ofrece un respaldo adicional al sector cultural para recuperarse de la crisis, con una inversión que rondará los 112 millones de euros». Hasta el momento, 2.500 empresas culturales, entre ellas varias cadenas comerciales, se han adherido al programa, y podrán continuar sumándose sin fecha límite. Una vez concedida la ayuda, los jóvenes dispondrán de un año para gastar los 400 euros.
El Bono Cultural Joven funciona con una tarjeta de prepago que emite Correos y que el beneficiario puede tener de forma virtual en su móvil o de forma física. En este caso, puede recogerse en cualquier oficina postal de España. En cuanto al diseño del bono, está dividido en tres tramos para diversificar la inversión. Así, 100 euros son para productos físicos, otros 100 son para productos digitales y los 200 restantes van dirigidos a artes escénicas. Cabe recordar que de cara a 2023 el Ministerio ha empezado a trabajar en la segunda convocatoria de la iniciativa. Para ello, se tendrá en cuenta la experiencia piloto de esta edición, a fin de optimizar el sistema de solicitud y tramitación.