La Universitat les Illes Balears, con la gestión de la Fundació Universitat Empresa (FUEIB), impulsa dos nuevos másteres centrados en el derecho empresarial. Se trata del Máster en Derecho de Sociedades y el Máster en Derecho Concursal, que concentran la formación presencial los jueves por la tarde para facilitar la compatibilidad con el empleo.
El ámbito societario y los concursos de acreedores están llamados a tener un gran protagonismo en el contexto de crisis económica provocada por la COVID-19. De hecho, existen muchas herramientas en situaciones de precrisis en las que los abogados pueden asesorar y dar soluciones a particulares, trabajadores autónomos, pequeñas y grandes empresas.
Las dos propuestas formativas están codirigidas por Guillermo Alcover, abogado, doctor y catedrático de Mercantil, y Petra Thomàs, doctora en Derecho y profesora titular de Mercatil de la UIB. Además, el claustro docente incluye a los mejores especialistas de ámbito estatal. Los másteres pretenden dar respuesta a la necesidad de especialización y actualización constante de los profesionales relacionados con el mundo empresarial desde la perspectiva del Derecho de Sociedades, analizando las sociedades de capital y sin dejar de lado otros tipos especiales de sociedades, sí como los aspectos laborales, fiscales y penales relevantes, además del derecho a la insolvencia como solución o prevención de las situaciones de crisis.
Estas formaciones analizarán todas las novedades del texto refundido concursal que está en vigor desde el pasado mes de enero.
Asimismo, se ofrece la posibilidad de obtener en dos años una doble titulación de posgrado en materia mercantil.
Petra Thomàs explica el contenido de cada uno de los másters: “El Máster en Derecho de Sociedades se centra en cómo se constituyen y cómo funcionan las sociedades, principalmente sociedades anónimas y limitadas, que son las más consolidades. Mientras que el Máster en Derecho Concursal da soluciones de carácter preventivo para intentar salvar la situación con acuerdos extrajudiciales cuando sea posible y mediación concursal. En caso de aplicar el concurso explicamos cómo reestructurar el pasivo y en caso de liquidación, cómo se realiza”, indica.
ACTUAR PRONTO. Thomàs es clara al aconsejar a los empresarios actuar lo antes posible si ven que tienen problemas financieros. “La recomendación general, si están ahogados y no pueden hacer frente a los pagos, es intentar reestructurar el pasivo lo antes posible. Lo mejor es poner remedio pronto con un acuerdo prejudicial”, explica. En este sentido, señala las ventajas del concurso de acreedores voluntario: “Los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) impiden despedir trabajadores, pero hay otras deudas que te hacen susceptible de poder entrar en concurso, como son las deudas con hacienda, la Seguridad Social, los proveedores o hipotecas o alquileres. Un concurso de acreedores tiene ciertas ventajas porque permite una reestructuración de pasivo, paralización de intereses y de ejecuciones y deshaucios y una exoneración parcial de pasivo insatisfecho en ciertos casos”, puntualiza, y advierte: “Los concursos voluntarios ya están aumentando, pero la avalancha llegará cuando se acaben los ERTE”.
Ambos másteres, de carácter semipresencial -y virtual si fuera necesario-, están destinados a profesionales del mundo jurídico y económico especializados o que pretenden especializarse en materia societaria o concursal, sin dejar a un lado el normal desarrollo de su carrera profesional. Tienen una carga lectiva de 60 ECTS. El periodo de matrícula está abierto y el 12 de noviembre empiezan las clases.