La agencia de seguridad ucraniana SBU ha hecho públicas tres conversaciones en las que participarían supuestos miembros de la Inteligencia militar rusa y separatistas del este de Ucrania que demostrarían que los rebeldes derribaron el avión de Malaysia Airlines que se estrelló el jueves con casi 300 personas a bordo.
La primera llamada hecha pública por Kiev habría tenido lugar 20 minutos después de la caída de la aeronave. En ella, un supuesto dirigente separatista, Igor Bezler, informa a un dirigente de la Inteligencia rusa identificado como Valeri Geranin del derribo del avión, según el periódico 'Kyiv Post'.
En la segunda conversación, un rebelde de apodo 'Mayor' confirma «al cien por cien» a otro separatista, 'Griego', que se trata de una aeronave civil. Llega a decir que no hay «absolutamente nada» militar entre los restos de la aeronave y, en cambio, habla de «utensilios civiles, material médico, toallas, papel higiénico».
El tercer extracto hecho público por la SBU recoge un diálogo entre un miliciano y un comandante cosaco, Nikolai Kozitsin, en el que también se intercambian primeras impresiones sobre lo ocurrido. «Hay muchos cuerpos de mujeres y niños», dice el separatista, que acto seguido pregunta «qué estaba haciendo en territorio ucraniano» un avión de Malaysia Airlines.
«Eso significa que transportaba espías. No deberían estar volando. Hay una guerra», responde Kozitsin.
El Ejecutivo ucraniano ha culpado a los separatistas de haber derribado el avión con un misil tierra-aire. El presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, ha hablado abiertamente de «acto terrorista».
Por su parte, el primer ministro de la autoproclamada República Popular de Donetsk, Alexander Borodai, ha dicho que la caída de la aeronave se debió a una acción de la Fuerza Aérea ucraniana.