El Gobierno de Reino Unido se ha mostrado «muy preocupado» por la situación en la que se encuentran 141 migrantes y refugiados rescatados en el Mediterráneo por el 'Aquarius', pero ha asegurado que la «responsabilidad» de su desembarco debería recaer «en un puerto seguro cercano».
«Está establecido que la responsabilidad para gestionar el desembarco, en un puerto seguro cercano, corresponde al centro regional competente de rescate marítimo, de acuerdo también a los deseos del propietario del barco», ha alegado un portavoz del Ministerio de Exteriores británico consultado por Europa Press tras los llamamientos a la intervención gibraltareña.
Reino Unido, no obstante, «está comprometido para trabajar junto a los socios europeos para resolver a largo plazo el desafío compartido de la migración irregular», ha añadido el portavoz del Foreign Office, que no ha aludido al vínculo del 'Aquarius' con Gibraltar --territorio del que al menos por ahora tiene bandera--.
Los gobiernos de Malta e Italia, los países más cercanos a la zona de navegación del 'Aquarius', han rechazado en estos últimos días el desembarco de los 141 migrantes. El Gobierno italinao ha instado al barco, gestionado por las ONG SOS Mediterranée y Médicos Sin Fronteras (MSF), a poner rumbo a Gibraltar.
Sin embargo, la Administración Marítima del Peñón publicó el lunes un comunicado para anunciar que, tras un supuesto incumplimiento de la normativa por parte del 'Aquarius', el buque se quedará el 20 de agosto sin pabellón gibraltareño. Para las ONG, se trata de una «maniobra política» porque el barco ha cumplido «todas las exigencias reglamentarias» y ha pasado «todos los controles técnicos».