El Gobierno controlado por el Ejército de Birmania ha bloqueado el acceso a Internet desde los teléfonos móviles este sábado después de que durante la mañana varios centenares de personas se hayan manifestado en Rangún contra el golpe militar.
Numerosas organizaciones como la Organización de la Sociedad Civil de Myanmar o Amnistía Internacional han denunciado en la mañana de este sábado que el Gobierno no solo ha bloqueado las redes sociales, sino también la conectividad a Internet a través de teléfonos móviles.
Estas organizaciones han pedido a las principales empresas de telecomunicaciones del país no cortar las líneas de las que califican como "sus únicas formas de comunicación".
El Ejército ya había pedido el bloqueo de redes como Instagram, Twitter y Facebook en una maniobra denunciada por organizaciones como Human Rights Watch.
Pese a la caída del servicio de esta herramientas de comunicación, medios como Channel News Asia o Myanmar News han informado de que varias manifestaciones con entre cientos y miles de personas están bloqueando algunas calles de la capital del país de manera pacífica.
En varias publicaciones en redes sociales se puede observar como los manifestantes elevan el brazo y levantan tres dedos, el signo de rebelión popularizado por la saga de libros y posteriormente películas 'Los Juegos del Hambre', que ha sido replicado en otras protestas en Asia como las de Tailandia.
EL GOLPE DE ESTADO
El pasado lunes, el Ejército retuvo a la líder de 'facto' del país, la premio Nobel de la Paz Aung San Suu Kyi, y a otros miembros de su gobierno y su partido bajo la acusación de haber ganado las elecciones parlamentarias de manera fraudulenta.
La represión se fue extendiendo y según la Asociación de Presos Políticos del país 134 diputados y funcionarios públicos y 18 activistas han sido detenidos durante el golpe.
Con la deposición del Gobierno, se ha dado por finalizada una etapa de frágil transición democrática que en los últimos años había estado marcada por el frágil equilibrio entre el Gobierno de la LND y los militares, con amplios poderes, así como la erosión de la imagen internacional del país por los ataques indiscriminados contra la minoría musulmana rohingya.
El equilibrio se rompió después de que en las elecciones del pasado 8 de noviembre el partido de Ang San Suu Kyi obtuviera una mayoría suficiente para gobernar.
La Comunidad Internacional ha condenado el golpe en su gran mayoría, con la notable excepción de China, país que ha sido presionado esta noche por el secretario de Estado de Estados Unidos, Anthony Blinken.
Desde la LND se ha llamado a sus simpatizantes a cometer actos de desobediencia civil y manifestarse de forma pacífica.