Las autoridades de Marruecos han anunciado la suspensión de las clases en 42 localidades y comunas situadas en las provincias afectadas por el terremoto de magnitud 6,8 en la escala abierta de Richter que sacudió el país en la noche del viernes, que ha dejado hasta la fecha más de 2.100 muertos y 2.400 heridos, según el balance oficial.
El Ministerio de Educación Nacional marroquí ha señalado que la medida, que afecta a localidades en las provincias de Al Hauz, Chichaua y Tarudant, entrará en vigor este lunes, mientras que las escuelas situadas en el resto del país retomarán las clases durante esta jornada.
Asimismo, ha reclamado garantizar medios para poder impartir clases de forma telemática a los alumnos en las zonas damnificadas, al tiempo que ha incidido en que trabaja para dar continuidad al programa escolar en otras provincias afectadas por el terremoto.
El Ministerio de Educación Nacional ha detallado además que entre las víctimas mortales del terremoto hay siete profesores, antes de señalar que el seísmo ha causado daños en 530 escuelas y 55 internados, tal y como ha recogido el diario marroquí 'Le Matin'.
El terremoto es el más grave registrado en Marruecos por número de víctimas desde el que afectó a la región de Alhucemas el 24 de febrero de 2004, que dejó cerca de 630 víctimas mortales y alrededor de un millar de heridos.
Hasta ahora, Rabat solamente ha aceptado la ayuda de España, Qatar, Reino Unido y Emiratos Árabes Unidos, justificando su decisión en la "evaluación precisa" realizada de las necesidad tras el corrimiento y "teniendo en cuenta que la falta de coordinación en tales situaciones podría ser contraproducente".