Unos 300 trabajadores de Air Comet se manifestaron ayer frente al Ministerio de Fomento para solicitar una reunión formal con el ministro, José Blanco, exigiendo su recolocación en las aerolíneas que adquieran los 'slots' pertenecientes a la compañía. Reivindicaron, sobre todo, un actuación similar a la de hace tres años con los trabajadores de Air Madrid. Los manifestantes instaron a Díaz Ferrán y al copropietario de Air Comet Gonzalo Pascual a que paguen las nóminas atrasadas.
Por otro lado, decenas de afectados por el cierre de la aerolínea, peruanos y españoles, trataron de tomar el Consulado de España en Lima, reclamando que se les tramite cuanto antes un billete de vuelta a Europa. Fuentes de la Embajada en Lima aseguraron que las protestas movilizaron a 70 personas, 30 de las cuales lograron entrar en la delegación diplomática.
En el seno de la CEOE, Díaz Ferrán cuenta con el apoyo del 95% del Comité Ejecutivo y con el de la «práctica totalidad» de los 21 vicepresidentes de la organización empresarial, según aseguró ayer su portavoz oficial, Francisco Ochoa. Contrastando con ese apoyo, el presidente de Cepyme, Jesús Bárcenas, afirmó que si su empresa atravesara los problemas que tiene Air Comet, él no dudaría en presentar la renuncia al cargo. En declaraciones difundidas por la Cadena Ser, Bárcenas fue contundente: «Entiendo que como persona tengo que afrontar mis responsabilidades, y creo que estar al frente de una organización comarcal, provincial, regional o nacional... Para mí, yo hubiera presentado la renuncia irrevocable», afirmó.