El Gobierno va a rebajar una media del 5% las retribuciones de los empleados públicos para este año y las va a congelar en 2011.
Más de 2,6 millones de empleados públicos se verán afectados por el recorte salarial del 5 por ciento anunciado hoy por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, según los datos del Ministerio de Presidencia.
En España hay 2.659.010 funcionarios, de los que 1.345.577 corresponden a la administración de las comunidades autónomas, 627.092 a la local, 583.447 a la estatal y 102.894 a las universidades.
De los 583.447 funcionarios de la administración pública estatal, 239.865 trabajan en los ministerios, organismos autónomos y agencias estatales, 135.950 en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, 127.373 en las Fuerzas Armadas, 23.658 en la administración de Justicia y 56.601 a entidades y organismos públicos con régimen específico.
En cuanto a los funcionarios de las administraciones públicas (1.345.557), la mayoría pertenecen al área de la docencia no universitaria (539.669) y a las instituciones sanitarias del Sistema Nacional de Salud (491.107).
Las consejerías y sus organismos autónomos emplean a 252.265 personas, la Administración de Justicia a 38.710 y las Fuerzas de Seguridad a 23.826. Andalucía y Madrid serán las comunidades autónomas más perjudicadas, ya que cuentan con 499.974 y 427.650 empleados públicos, respectivamente.
Esta medida será anunciada esta mañana por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en su comparecencia extraordinaria en el Congreso, según informaron fuentes del Gobierno.
La rebaja de los salarios será proporcional a los ingresos, es decir que afectará más a los salarios más altos y también se recortará en un 15% el sueldo de los miembros del Gobierno.
En el inicio de su comparecencia, Zapatero justificó las nuevas medidas para la reducción del déficit, un esfuerzo «especial, singular y extraordinario» que es necesario «precisamente ahora», cuando se están viendo «signos» que ponen de manifiesto el inicio de la recuperación económica.
Además, el Gobierno suprimirá a partir del 1 de enero de 2011 el denominado cheque-bebé, la prestación de 2.500 euros por nacimiento, para reducir el déficit público.
También el Gobierno suspenderá en 2011 la revalorización de las pensiones, excepto las no contributivas y las mínimas, como parte del plan de austeridad.
Asimismo, el plan incluye la eliminación del régimen transitorio para la jubilación parcial previsto en la Ley 40/2007.