El vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, anunció ayer nuevas medidas para intentar reducir el consumo de petróleo en España en coordinación con las comunidades autónomas y los municipios.
Rubalcaba dijo a los periodistas que la próxima semana el ministro de Industria, Miguel Sebastián, va a tener reuniones con la Federación de Municipios y Provincias y las Comunidades Autónomas para «coordinar un conjunto de medidas encaminadas a reducir el gasto de petróleo».
Según el vicepresidente, esta serie de medidas van a afectar al conjunto de administraciones públicas del país con el objetivo de comprar menos petróleo y de esta forma «no comprometer la recuperación económica», ya que, según ha dicho, «España depende en exceso del petróleo». Aunque insistió en que España «tiene reservas suficientes y no hay problemas de suministro», pidió «un esfuerzo a los ciudadanos para que ahorren gasolina».
Rubalcaba indicó que cada subida de 10 dólares en el precio del barril de petróleo eleva la factura energética en 6.000 millones de euros anuales, por lo que es necesario «tratar de ahorrar combustible circulando mas despacio con medidas como la de reducir la velocidad en autovías a 110 kilómetros por hora».
Iluminación
La Federación Española de Municipios y Provincias (Femp) propondrá al Gobierno limitar el tráfico en el centro de las ciudades y controlar la iluminación en los edificios públicos, entre otras medidas para ahorrar energía y reducir la contaminación. Un portavoz de la Femp avanzó que éstas serán algunas de las propuestas a estudiar que su presidente, Pedro Castro, trasladará el próximo martes al ministro de Industria, Miguel Sebastián.
El departamento que dirige Miguel Sebastián asegura que está «abierto» a escuchar las medidas adicionales que se puedan adoptar en colaboración con los ayuntamientos y las comunidades autónomas, antes de que el Consejo de Ministros apruebe, el próximo viernes, el Plan de Ahorro Energético.
Como tantos otros palos de ciego que va dando el zapaterismo –y el sebastianismo–, lo que oculta la medida no es sino el desesperado afán recaudatorio de un pésimo administrador. En lugar de afrontar su responsabilidad, lo que el Gobierno hace es echar la carga en las espaldas del contribuyente. La Gaceta. Mientras: Bono pidió a varios empresarios del Ibex 35 publicidad para su hípica... Y esos son los Fachas-Rojos que nos gobiernan.