El pleno de las Corts Valencianes eligió ayer a Alberto Fabra como presidente de la Generalitat, con los votos favorables de los 55 diputados del PP y 43 en contra de los parlamentarios del PSPV, Compromís y EUPV. Fabra sucede en el cargo a Francisco Camps, que la pasada semana presentó su dimisión a raíz de la 'causa de los trajes' derivada de la 'trama Gürtel'.
El ya expresidente de la Generalitat Francisco Camps acudió a la votación, ocupando su escaño de jefe del Consell, después de que por la mañana abandonara la Cámara tras el discurso de Fabra.
Tras darse a conocer los resultados, los diputados del PP ovacionaron en pie al nuevo presidente de la Generalitat. El primero en felicitar a Alberto Fabra fue el exjefe del Consell Francisco Camps.
Continuismo
Fabra asumió la totalidad de los compromisos de Camps, con quien compartió protagonismo en su sesión de investidura como nuevo jefe del Consell.
Ambos llegaron juntos a Les Corts Valencianes, una hora antes de que comenzara el debate y acompañados por la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá; el secretario general del PPCV, Antonio Clemente; el portavoz parlamentario del partido, Rafael Blasco, y el presidente provincial del PP en Valencia, Alfonso Rus.
Fabra tuvo palabras de reconocimiento para Camps en su discurso, que comenzó resaltando su «admiración y respeto» por Francisco Camps, al que refirió como «un valenciano valiente, honesto y honrado» y al que dijo que siempre será «molt honorable».
El todavía alcalde de Castellón basó su discurso en la defensa de los compromisos de su antecesor e hizo pocos anuncios nuevos, entre los que destacó la creación de la Corporación Pública Empresarial Valenciana.
En su discurso, de casi media hora y donde alternó el castellano y el valenciano, Fabra consideró que es momento de «pasar página y recuperar la normalidad en las instituciones», porque, según defendió, «empezamos una nueva etapa que exige de nosotros más responsabilidad y compromiso que nunca».