El candidato socialista a la Presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, propuso ayer un «gran acuerdo» para «revisar» la estructura de las administraciones públicas y hacerla «más ligera y menos costosa» y, además, se ha comprometido a aplicar el principio «un político, un sueldo».
Rubalcaba recogió así el guante del líder del PP, Mariano Rajoy, y le retó a adelgazar toda la administración, incluido el número de parlamentarios y concejales, pero siempre y cuando no se merme la representatividad ni se fomente el bipartidismo. Rubalcaba no tuvo «ningún empacho» en asumir la idea que Rajoy planteó el jueves en Málaga y ofreció que, después de las elecciones del 20 de noviembre, haya un gran acuerdo nacional para revisar la estructura política del país, de manera que se pueda reducir y adelgazar al Congreso, al Senado, a las comunidades, a los parlamentos autonómicos, a los ayuntamientos y a las diputaciones.
Planteó también que cada cargo público no pueda cobrar más de un salario de la administración: «Un político, un sueldo». Compromisos que Rubalcaba ha formulado en un acto con cabezas de lista de su partido para el 20-N.
Pacto nacional
Sobre su ofrecimiento para revisar la estructura política, apostó por un gran pacto nacional tras el 20-N para estudiar la forma de aligerar la estructura política, ahorrar gastos y hacer que la administración sea más eficiente. Quiso dejar claro, sin embargo, que hay muchos concejales que no cobran, antes de apuntar que no va a permitir que «vuelvan los caciques a los pueblos».
«Nosotros sí estamos por ahorrar, por gastar con eficiencia y rigor», subrayó Rubalcaba, y alertó de que, no obstante, hay unas «líneas rojas» que no van a traspasar: la del gasto productivo, el que crea empleo, y los servicios públicos básicos.
Con este argumento, ratificó su compromiso en la defensa de las prestaciones por desempleo, de la sanidad, la educación y el sistema público de pensiones. Y es que, según su análisis, «no es lo mismo quitar duplicidades administrativas que zarandear la escuela pública».