La Audiencia Nacional reprocha al juez Pablo Ruz que procesara a tres altos mandos policiales por el llamado «caso Faisán» sin haber resuelto «inconsistencias relevantes» en su investigación y excluyendo otras hipótesis posibles «de forma no suficientemente justificada».
Así consta en el auto notificado ayer por el pleno de la Sala de lo Penal de este tribunal, que hace 43 días adelantó su decisión de revocar el procesamiento del exdirector general de la Policía Víctor García Hidalgo; el jefe superior de Policía del País Vasco, Enrique Pamiés; y el inspector de Brigada de Información de Álava José María Ballesteros, por los delitos de colaboración terrorista y/o encubrimiento y revelación de secretos.
Los catorce magistrados del pleno han enumerado diversos errores en la instrucción de Ruz sobre el «chivatazo» que en 2006 alertó a ETA de una operación policial contra su red de extorsión, que «ponen en evidencia la defectuosa metodología de investigación».
«Se ha seguido exclusivamente una hipótesis investigatoria, con exclusión, a juicio de la sala, de forma no suficientemente justificada, de otras vías o hipótesis posibles, especialmente ante la existencia de inconsistencias relevantes no resueltas en la hipótesis por la que finalmente se ha decantado el juzgado», subraya el auto.